El pasado 26 de enero, mujeres detenidas en la Unidad Penal 5 de la ciudad de Rosario, iniciaron un motín en forma de reclamo por falta de agua, de refrigeración, por la comida en mal estado y por los malos tratos.

Ante este episodio, Jacqueline Balangione, Defensora Provincial, realizó una denuncia por violencia institucional dentro del penal. En diálogo con LT10, confirmó que la denuncia la efectuó de forma personal, "se hizo el lunes a la tarde y en realidad es parte de un problema complejo, puntual que se dio en el pabellón 1 de la unidad de mujeres de Rosario, donde desde enero hay falta de agua y provisión de agua en mal estado".

"Esta revuelta empieza por el caso puntual de salud de una mujer que desde agosto del 2021 está en prisión preventiva por asociación ilícita. Las mujeres pedían que la llevaran al médico" ya que se quejaba de fuertes dolores abdominales. Luego de la revuelta lograron que fuera trasladada a un centro médico.  

"No es solo el tema del agua, sino la sobrepoblación, la atención inmediata de la salud y la decisión por parte de las agentes que ante el pedido de la interna, las mandan a meterse cada una en su celda, pero estas deciden quedarse en las rejas, y la respuesta es reprimir" agregó Balangione. 

La funcionaria destacó que el lugar tiene capacidad para 170 reclusas, pero hay 230 personas, incluidos niños.

Audio: Jaqueline Balangione, Defensora Provincial