Unión descansa, mientras Munúa estará obligado a meter mano ante River
El plantel tatengue tiene el fin de semana libre tras la derrota ante Racing, donde se fue expulsado Mauro Luna Diale. El DT debe buscarle un reemplazante, mientras analizará otras variantes en medio del receso por la fecha FIFA.
Unión sufrió una nueva derrota en la Liga Profesional, donde se encuentra entre los últimos puestos de la tabla, más allá que viene experimentando una mejoría futbolística que arrancó con la victoria ante Estudiantes y continuó con el empate ante Central.
Sin embargo, este viernes jugó un gran partido ante Racing, donde estuvo casi 70 minutos con un jugador menos en la cancha por la expulsión de Mauro Luna Diale, y alcanzó el empate, tuvo chances para ponerse arriba en el marcador pero se terminó quedando con las manos vacías.
Gustavo Munúa le dio fin de semana de descanso a sus jugadores ya que se viene el receso por la fecha FIFA, donde la Selección Argentina enfrentará a Panamá y Curazao, para festejar el título logrado en el Mundial de Qatar 2022.
En la próxima fecha Unión visitará a River en el Monumental, cotejo que todavía no tiene fecha definida. Y para ese compromiso, el DT tiene la certeza de que deberá meter mano en el equipo por la expulsión de Luna Diale.
De esta manera, todo apunta a que el paraguayo Junior Marabel, quien ingresó en el segundo tiempo frente a Racing, pica en punta para reemplazarlo, más allá que no habría que descartar al uruguayo Thiago Vecino.
En tanto que no habría que descartar una modificación de sistema, con el ingreso de Franco Calderón por Daniel Juárez, para que así el equipo pase a pararse con un 5-3-2, o bien alguna otra modificación que solo conlleve intercambio de nombres.
En ese sentido, no sería de extrañar que Calderón se meta entre los 11 por Lucas Esquivel, responsable en el segundo gol de Racing por la falta que le hizo a Matías Rojas, quien luego concretó el penal. Mientras que Kevin Zenón peleará por un lugar con Daniel Juárez.
Lo bueno para el DT es que tiene tiempo para trabajar de cara a un duro compromiso, pero con la certeza de que un buen resultado hará que su equipo recupere la confianza, en un momento donde la paciencia se comienza a agotar.