Comer al borde del espacio será una realidad dentro de poco
Comer al borde del espacio podría ser una realidad el año que viene, si la empresa francesa Zephalto se sale con la suya.
Esta empresa de turismo espacial, fundada por el antiguo controlador aéreo Vincent Farret d'Astiès, vende actualmente "billetes de pre reserva" para próximos viajes en una cápsula presurizada, llamada Celeste, unida a un globo estratosférico.
Esta cápsula ascenderá a una altitud de 25 kilómetros, permitiendo a los invitados maravillarse con la curvatura de la Tierra. Entre vista y vista, los viajeros serán agasajados a lo grande.
Los billetes de pre reserva cuestan 10.000 euros (unos US$ 10.900) y dan a los compradores la oportunidad de reservar un asiento en cuanto se pongan a la venta. En total, un viaje en el Celeste costará 120.000 euros (unos US$ 131.100).
Zephalto explicó a CNN Travel que ya se han reservado plazas para los primeros vuelos desde finales de 2024 hasta mediados de 2025, y que ahora se están vendiendo las pre reservas para mediados de 2025 en adelante.
Celeste promete transportar a seis pasajeros y dos pilotos a la máxima altitud en solo 90 minutos, a una velocidad de cuatro metros por segundo. A continuación, la cápsula flotará sobre la Tierra durante tres horas, tiempo suficiente para disfrutar de una comida de varios platillos y varias copas de buen vino francés.
Farret d'Astiès explicó a CNN Travel que, aunque las opciones de comida y bebida de Celeste serán lujosas, "las vistas y el viaje en general siguen siendo el eje central de la oferta, permitiendo a los huéspedes apreciar y asimilar la belleza de su entorno".
Cenar a gran altura
Desde que Dennis Tito, el primer "turista espacial" de la historia, surcó los cielos en 2001, pocos han seguido sus pasos. Pero en los últimos años, empresas de turismo espacial de alto perfil como SpaceX, Blue Origin y Virgin Galactic han estado haciendo movimientos en este campo, prometiendo hacer del espacio el próximo lugar de vacaciones de visita obligada.
Zephalto, fundada en 2016, no es la única empresa que espera transportar pasajeros en un elegante globo aerostático. La empresa floridana Space Perspective está aceptando reservas para su Spaceship Neptune.
Conviene recordar que hay una gran diferencia entre un viaje al espacio orbital -que implica despegues a alta velocidad que rompen la gravedad y una mayor duración- y el espacio suborbital, en el que los viajeros se exponen brevemente a la ingravidez y a vistas del espacio durante un vuelo al borde de la atmósfera, a 100 kilómetros sobre la Tierra.
Y los viajes al "borde del espacio", como los propuestos por Zephalto y Space Perspective, vuelven a ser diferentes.
Estas cápsulas no llegarán al espacio suborbital, pero volarán a una altura muy superior a la de un avión comercial normal. Eso significa unas vistas magníficas de la Tierra y las estrellas, pero sin la pérdida de gravedad y la consiguiente sensación de ingravidez.
Farret d'Astiès compara el ambiente dentro de Celeste con el de viajar en avión, pero con unas vistas más increíbles y un ambiente más lujoso. El interior de la cápsula presurizada está siendo proyectado por el diseñador francés Joseph Dirand. Aún no se han dado a conocer los diseños, pero Zephalto promete que destilarán "savoir-faire francés".
"Refinado y elevado"
Aunque aún no se han dado a conocer los futuros chefs de Celeste, la idea es que haya una serie de maestros culinarios que tendrán vía libre para elegir qué hay en el menú. A Zephalto le interesa que "los chefs puedan ejercer su licencia creativa y garantizar la capacidad de personalizar la experiencia de los huéspedes para ofrecer algo refinado y elevado", por lo que algunos chefs pueden decidir que la cena suceda antes del viaje, en lugar de durante el mismo.
Zephalto ha colaborado estrechamente en el proyecto con el CNES, la agencia espacial francesa, y cuenta entre sus socios con la empresa aeronáutica Airbus. Según la empresa, el globo, que funcionará con helio, deberá contar con las mismas certificaciones de la Agencia Europea de Seguridad Aérea que un avión comercial.
Zephalto afirma haber completado tres vuelos de prueba parciales pilotados, con otro programado para finales de este año que se someterá al viaje completo. Los vuelos estarán abiertos a personas de todas las edades, y no se necesita formación previa.
Por ahora, está previsto que Celeste despegue de Francia, pero Zephalto espera globalizarse en breve.