Cristina regresó con una embestida contra las petroleras
La presidente prometió poner fin a las avivadas y retomó las denuncias hechas durante su ausencia. . Reclamó inversiones al sector petrolero, cuestionó a la oposición y anunció caída del desempleo. Apertura del informe Rattembach para su difusión.
Volvió después de 20 días y con humor, ironía y algo de sarcasmo también, respondió a cada uno de los temas que estuvieron en agenda desde su operación de tiroides el 4 de enero. En tono calmo Cristina Fernández de Kirchner habló de todo. Excepto del partido de fútbol que el gobernador Daniel Scioli compartió con Mauricio Macri, hoy el opositor más instalado en la opinión pública. Los dejó afuera del reparto de retos y advertencias que dedicó a cada uno de los sectores con los que el Gobierno está en conflicto. “Es necesario reinvertir en el país” dijo al promediar su discurso y luego de varias críticas a las empresas petroleras. “El subsuelo es de los argentinos y está concesionado”, recordó y agregó que “por lo tanto no se puede volver a la época del Virreinato donde se llevaban todo y no dejaban nada”. “Creo que es bueno que sepan que han pasado esas épocas y que es necesario reinvertir en el país”, siguió la jefa de estado mientras corría con las manos su cabello para dejar a la vista la cicatriz en su cuello.
Además señaló que “el costo del combustible tiene que ser nacional y no internacional porque se produce en Argentina”.
Como es usual en ella no leyó una sola línea y apenas tomó un ayuda memoria para repasar los nombres de las empresas de capitales británicos con negocios en la Argentina cuando se refirió al reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas (ver aparte).
Durante la licencia de la Presidenta hubo una denuncia de las cámaras transportistas por el precio al que las petroleras les vendían el gasoil, lo que motivó
una denuncia de Amado Boudou –a cargo interinamente del Poder Ejecutivo hasta ayer– y del ministro de Planificación Julio de Vido. También como es usual en ella, mientras hacía una mueca dijo que el aumento de la importación de combustibles en 2011 fue un 110% mayor que en 2010 y que “si las empresas petroleras en nuestro país hubieran mantenido o aumentado la producción, hubiera sido mejor”. “De los 9 mil millones de dólares importados en combustibles, 7.547 (millones) fueron en cosas que se podrían haber producido en la Argentina”, indicó para –sin mencionarlo y con otra sonrisa– criticar al titular del SUPEH, Antonio Cassia, al mencionar que “un sindicalista salió a defender a la empresa YPF”. “Me llamó la atención que se pagara el doble el gasoil y que del sector del trabajo no se dijera nada”, agregó aunque se excusó irónicamente al decir que tal vez no vio que alguien lo hiciera “porque no ví mucha televisión y por ahí algún diario no leí”.
“Algunos quieren identificar sintonía fina con plan de ajuste, pero la sintonía fina va a ser que se acabó la avivada”, se quejó. Y hasta amenazó con apelar a “todos los instrumentos que las leyes y la Constitución permiten y obligan a los gobernantes para defender los intereses de los 40 millones de argentinos”.
De paso también envió un mensaje a la oposición y a las ONG –en este caso seguramente por las protestas que en los últimos tiempos se registran contra la explotación minera que el gobierno impulsa– al indicar que “no he escuchado a ninguna ONG ambientalista referirse a lo que están haciendo en Malvinas” y enumeró: “Petroleras sin control, posibilidad de derrame”... mientras pedía que además de defender “a las ballenas” defiendan “todas las cosas que se están llevando”.
En otro tramo de su discruso volvió a referirse a las petroleras pero al preguntar si la oposición había dicho algo sobre “las maniobras”. “¿En Punta del Este?”, preguntó sonriendo con la vista en el público tal vez en alusión a Elisa Carrió, quien suele vacacionar –desde joven, nobleza obliga– en esa playa del Uruguay.
La Presidenta llegó quince minutos antes de las 19 a la Casa Rosada después de poco menos de un mes desde el último acto que encabezó allí con gobernadores. Eligió un la firma de convenios con municipios en el Salón de las Mujeres del Bicentenario para regresar y anunciar que el cuestionado Indec dará a conocer una baja en el desempleo que rondará, adelantó, el 6,7%. (Ver aparte)
En un nuevo repaso de su gestión y de anuncios realizados por el propio Boudou, resaltó el crecimiento de la actividad económica del 9,2 por ciento y el “excelente superávit comercial” de 10.347 millones de dólares en 2011.
Hubo guiños para sus funcionarios más fieles y para el final, los detalles sobre su operación.