El dueño de Buquebus calificó a los pasajeros de “caprichosos
Se trata de Juan Carlos López Mena. Lo declaró luego de la confusa demora de 12 horas en la salida de uno de sus ferrys.
López Mena lo hizo de nuevo. El polémico naviero argentino propietario de Buquebus, Juan Carlos López Mena, salió a hablar sobre la confusa demora de 12 horas en la salida de uno de sus ferrys en la ciudad de Colonia, estando el puerto abierto, según explicó la Armada del país vecino. Como de costumbre, habló mucho, no pidió disculpas y explicó muy poco.
“Si hay tormenta, no podés salir. No importa el capricho de cualquiera, aunque se enoje”, opinó López Mena. Y aseguró que los momentos de tensión que se vivieron a bordo del buque se debieron a “Un grupito de 10 personas” que “no están acostumbradas a viajar mucho”.
El empresario aseguró que “podíamos estar todo un día” esperando para zarpar. A modo de justificación agregó “He estado dos días en un aeropuerto en Suecia porque había nieve y corría riesgo el avión. Las horas son las horas que sople el viento. No depende de nosotros”. En otras palabras, la gente que reclamó y denunció el accionar de Buquebus son, para su dueño, gente sin mundo y con poco dinero.
En su disertación, López Mena atacó también a la prensa: “Sucede que al periodismo le gusta las malas noticias”, agregó el empresario sobre la espera de 12 horas que tuvieron los pasajeros en su viaje hacia la final de la Copa del Mundo Sub 20, según cuenta el diario El País del Uruguay. Y fue más allá, responsabilizó a los medios de comunicación por divulgar las quejas de los pasajeros: “El periodista debería pedirle a la empresa cuál es su opinión. ¿Quién no puede protestar? Yo puedo protestar. Si fuera periodista, le preguntaría al otro qué sucede”, sentenció.
30 millones de dólares a cambio de una concesión por 50 años
En la misma entrevista con el matutino oriental, López Mena contó que tiene es sus plantes una nueva obra en la terminal por una inversión total de 3 millones de dólares, a cambio el Puerto sería exclusivo para Buquebus durante 50 años.
El proyecto incluye un edificio al lado de donde está la ANP y tres puentes superpuestos que lo conectarían con la terminal. Son puentes de 200 metros y el primero estaría a unos cinco metros de altura. Uno para los coches, otro para los pasajeros y el tercero -con jardines- para que el turista pueda ver desde la altura el panorama.
Actualmente Buquebus opera en Uruguay sin papeles, ya que la concesión que tenía y vencía en 2024 fue cancelada por la administración de Pepe Mujica. Hoy en día la empresa le paga un canon al Puerto por tener la terminal ahí. El proyecto sería clave para encaminar la renovación de la concesión.