L-Gante, estaba a punto de salir de la cárcel donde está preso desde el 6 de junio, acusado de haber secuestrado a un joven y de haberlo amenazado de muerte. Sin embargo, en las últimas horas se supo que por una resolución judicial seguirá en la DDI de Quilmes.

En principio, la Justicia había determinado que el músico podía salir de prisión y alojarse en una casa de un country de la localidad de Canning, en el partido bonaerense de Ezeiza, donde debía permanecer con tobillera electrónica, pero los doctores Leonardo Sigal y Pablo Becerra solicitaron que se revoque el decisorio impugnado.

“Consideran sensible entender que beneficiar a un imputado también puede beneficiar a la víctima, en relación al fundamento de que si Valenzuela es pasible de tal medida, se terminarían las amenazas en contra de las víctimas y sus letrados. Sostiene que los peligros de fuga y entorpecimiento probatorio, por el momento, no pueden evitarse con la aplicación de otra medida menos gravosa”, aseguraron desde la Sala I de la Cámara de Apelaciones de Mercedes. Ante esto, al abogado del intérprete de cumbia 420 le queda una instancia de apelación en la Cámara Casación de Bonaerense para lograr la excarcelación de su cliente.

Por qué había sido detenido L-Gante

La denuncia que derivó en la detención del cantante fue realizada el 27 de mayo por Torres, vecino de la familia de Valenzuela, que reside en el barrio Bicentenario de General Rodríguez, en el oeste del conurbano.

Esa mañana, a la salida del local bailable “Río” ubicado en esa localidad, hubo un incidente con varios jóvenes integrantes de la denominada “La Mafilia”, el grupo de amigos y músicos al que pertenece L-Gante.

Cuando Torres se retiró del boliche para ir a su casa, comenzó a recibir amenazas por parte de Valenzuela y, tras ello, integrantes de ese mismo grupo fueron hasta su domicilio y lo agredieron físicamente tanto a él como a su familia. Luego, pasó un BMW blanco conducido por el artista, que bajó el vidrio, le apuntó con un arma y lo hizo subir al auto, dijo el denunciante.

Después, algunos miembros de “La Mafilia” fueron demorados por la Policía y L-Gante regresó hacia donde estaba el móvil, bajó el vidrio y les dijo a los agentes: “Largame a los pibes o a éste te lo mato”, en referencia a la víctima que estaba retenida dentro de su BMW.

De acuerdo a la denuncia, Torres permaneció 23 minutos cautivo hasta que L-Gante recibió una llamada en la que le aseguraban que sus amigos habían sido liberados por la Policía y soltó a las víctimas.