En Unión el foco de atención, además del partido del jueves ante Godoy Cruz en Santa Fe, está centrado en la lesión en la rodilla de Enzo Roldán, que lo marginó del último compromiso. Desde el duelo ante San Lorenzo arrastra la molestia, que luego le impidió ser considerado, a punto tal que podría ser necesaria una operación.

De todas maneras, el cuerpo médico intentó un tratamiento especial con plasma para ver cómo responde en los trabajos de este lunes y martes. La meta es disminuir la inflamación y estimular el crecimiento celular. Un método muy recurrente en los últimos tiempos.

Sería una última movida para luego hacer nuevos estudios y constatar si tiene réditos. Más que nada, porque una operación en los meniscos le demandaría varias semanas fuera de las canchas y es una pieza muy importante. Juega en contra el poco margen que hay para que haga efecto.

Por eso es una información que será parte muy importante de la agenda en el mundo rojiblanco, que pelea por mantener la categoría, que se prepara para recibir a Godoy Cruz y posteriormente visitar a Platense. Luego, vendrá la recta hacia el clásico.