Cuatro técnicas para doblar remeras
Aprendé cómo ahorrar espacio y evitar que se arruguen dentro de tu ropero.
Para doblar una remera de forma práctica y evitar las arrugas, podés probar diferentes técnicas como las que se detallan a continuación.
1) Una opción es pellizcar tres puntos de la tela y sacudirla; se conoce como el método pellizcar y doblar y te toma unos segundos. Comenzá colocando la prenda de lado con el cuello a tu derecha para ubicar los puntos donde debés pellizcar.
El primer punto (A) está ubicado al nivel del pecho y el segundo punto (B) se ubica en la parte superior derecha de la ropa. Considerá que el tercer punto está en el dobladillo inferior de tu lado izquierdo. Con un solo movimiento, pellizcá los puntos A y B, luego cruzá los brazos para pellizcar el punto C y descruzá los brazos, sacudí la remera y doblala.
2) Otro método consiste en estar de pie. Con la parte delantera de la remera hacia vos, doblá la parte superior hacia abajo, luego doblá la parte superior e inferior para crear un cuadrado y llevala a tu pecho. Aplaná y terminá doblando.
3) Por otro lado, la manera de Marie Kondo consiste en doblar hacia afuera en lugar de hacia adentro y luego doblar en tercios, formando un pequeño rectángulo o una especie de paquete. El toque final es que se levanten solas para almacenarlas hacia arriba en los cajones, casi como si hubieras creado un archivador de ropa. Este método es el mejor para ver toda tu ropa de un vistazo.
4) Si tenés que viajar y querés que no se arruguen y no ocupen mucho espacio, esta técnica es popular en el ejército.
– Extiendé la remera plana, boca arriba.
– Doblá la parte inferior hacia arriba de 10 a 12 centímetros.
– Alisá la tela para minimizar las arrugas y luego doblá la prenda en tres partes.
– Comenzá por el lado izquierdo, doblándolo sobre el centro. Luego tomá la manga izquierda y doblala hacia atrás sobre el centro.
– Ahora hacé lo mismo con el lado derecho.
– Traelo antes de doblar la manga derecha hacia el centro.
– Ahora podés empezar a rodar. Comenzá en el extremo del cuello y mantené el rollo bien ajustado.
– Una vez que llegues al final, deshacé el pliegue que creaste en la parte inferior de la remera y colocalo sobre cada extremo del rollo para mantenerlo en su lugar.
En cuanto a las chombas con cuello se ven mejor colgadas, pero cuando llega el momento de viajar, doblarlas es inevitable. Comenzá colocando los botones boca abajo y doblando las mangas largas una a la vez. Luego doblá ambos lados hacia el centro, seguido por la parte inferior en tercios.