Luego de la derrota como visitante ante Barracas Central, el plantel de Colón fue licenciado hasta el jueves por la mañana para dar vuelta la página y empezar a planificar el choque contra River de la 9ª fecha de la zona A de la Copa de la Liga Profesional. Sin embargo, hubo cambio de planes y el retorno al trabajo se adelantó para este miércoles por la tarde.

Por ahora, con Néstor Gorosito al frente, que por tener libre este martes se quedó en Buenos Aires para estar con su familia. Algo que suele hacer cuando toca jugar fuera de Santa Fe y con margen para laburar. 

Un momento deportivo complicado, ya que otra vez está en zona de descenso junto a Huracán y Gimnasia. El revés ante el Guapo caló hondo en los ánimos. Es así como ahora habrá una semana larga para cambiar el chip y tratar de dejar los tres puntos en casa ante el rival quizás más fuerte, maximizando la dificultad.

Se espera además que, antes de comenzar las tareas en el predio 4 de Junio, esté la cúpula dirigencia para respaldar al grupo y el cuerpo técnico en esta carrera por permanecer en Primera. Pensando en lo que viene, habrá que ver cómo está Favio Álvarez, que terminó con un problema físico, al igual que Rubén Botta, con un calambre y la dolencia en la zona intercostal.