La historia del argentino que combate en el ejército de Israel

Natán De Leo, un cineasta que vive en Israel, fue convocado por el gobierno local en plena guerra tras el ataque de Hamas.

Natán De Leo es un cineasta argentino, hincha de Gimnasia La Plata, que vive en Israel y forma parte del ejército en plena guerra tras el ataque de Hamas. “Si bien nací en Argentina y viví ahí hasta los 26 años, estoy defendiendo mi casa y a mi gente. Soy israelí y me siento israelí”, reconoce.

Natán está en una base cerca de Jerusalén, pero no puede dar su ubicación por cuestiones de seguridad. “No puedo revelar el lugar exacto, lo tengo prohibido por el ejército“, agrega, mientras deja en claro lo que siente: “Pienso en mi familia y amigos. Me pidieron que vuelva, pero mi lugar en este momento es acá”.

En una entrevista telefónica con el programa Gente Despierta, de la radio platense La Cielo, Natán De Leo detalla en primera persona lo que significa estar en pleno conflicto. “Es un desastre lo que está pasando acá, no se veía algo así en 50 años. Es una locura. A toda la sociedad, al ejército y al gobierno nos tomó por sorpresa”.

En plena guerra, en su corazón hay lugar para Gimnasia y Messi

De Leo cuenta un detalle que sorprende a todos: en plena guerra usa camisetas de Gimnasia y de la Selección argentina, con el 10 de Lionel Messi. “Soy re Tripero. Me vine a la guerra con el mate, el arma y la casaca del Lobo. También uso la diez de Messi”, asegura.

Uno de sus deseos es que las fotos suyas con la camiseta de Gimnasia en el ejército de Israel les llegue a los jugadores del Lobo: “Si se puede, sería espectacular”.

Soy socio de la filial Triperos en Europa. La foto le llegó a Pedro Troglio y me mandó un video re lindo, demostrando su apoyo”, continúa. Y deja un mensaje: “Los colores de la camiseta de Gimnasia son los de la bandera de Israel. Entonces hay como una conexión ahí”.

“Nadie tiene dudas de que vamos a ganar”

De Leo fue convocado por el gobierno de Israel, algo que suele ocurrir de manera periódica. “El ejército es obligatorio en este país, para todos los hombres y mujeres. Cuando termina el servicio, uno queda como reservista hasta los 40 años. Te llaman una vez por año, según lo que necesiten. Esta vez fuimos convocados 300 mil”-

Ante la pregunta sobre cómo se encuentra, lo tiene muy claro: “La moral está muy alta. Nadie tiene dudas de que vamos a ganar, como siempre. El pueblo de Israel está más vivo que nunca”. Pero de inmediato recuerda los horrores de la guerra.

“Uno se pone a hablar con gente, amigos, hay muchos muertos. Con cada persona que uno habla, tiene un amigo que murió, lo mataron, que pasó algo”, afirma.

Y cuenta una historia personal: “Yo trabajo en series de televisión y en películas, y un amigo que era ayudante de producción, con el que trabajé hasta hace un mes y medio, estaba un kibutz cuando llegaron los terroristas y empezaron a disparar a mansalva. Este chico perdió la vida, pero salvó a ocho personas: los subió a su auto y manejó mientras se desangraba”.

Por último, y ante la pregunta sobre si tiene miedo, no duda: “No tengo miedo. Estoy capacitado para defenderme, rodeado de gente que está capacitada. Me siento más seguro acá que en mi casa. Siento que aporto mi granito de arena”.