Argentina- Uruguay será confirmado con sede en la Bombonera
El clásico se jugará el próximo jueves 16 de noviembre por la quinta fecha de Eliminatorias Sudamericanas se llevará a cabo finalmente en cancha de Boca.
El partido entre Argentina y Uruguay a disputarse el próximo jueves 16 de noviembre por la quinta fecha de Eliminatorias Sudamericanas se llevará a cabo finalmente en la Bombonera boquense, luego de descartarse inicialmente el estadio de River Plate y ahora la alternativa del Mario Kempes cordobés, y mañana será comunicado oficialmente.
Según fuentes de Uruguay a las que tuvo acceso Télam, ya la AFA le efectuó la comunicación de dicho cambio de escenario a su par de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y mañana se realizará la oficialización de tal cambio.
El estadio Mas Monumental en el que se jugaron hasta ahora los dos primeros partidos como local frente a Ecuador y Paraguay estará ocupados por varios shows musicales en los próximos días y esto obstaculizará la realización del encuentro frente al seleccionado dirigido por Marcelo Bielsa, lo que motivó la decisión de AFA de trasladar el encuentro al Mario Kempes, con una manera también de llevar al campeón del mundo al interior del país.
Pero esta decisión no fue recibida de buen grado por el técnico Lionel Scaloni y sus dirigidos, aunque no por el hecho de ir a Córdoba, sino por tener que realizar un viaje más en esta complicada ventana de fecha FIFA, en la que enfrentará a los dos equipos más fuertes de las Eliminatorias: el mencionado Uruguay y Brasil.
Es que si Argentina juega en Córdoba deberá viajar un día antes a esa ciudad y volver en la madrugada siguiente al predio de Ezeiza, para partir hacia Río de Janeiro 48 horas más tarde para enfrentar a los brasileños en el estadio Maracaná por la sexta jornada.
Y este trajín, que se sumaría a los ya prolongados viajes que los capitaneados por Lionel Messi traerán acumulado desde Europa, es lo que en alguna medida el cuerpo técnico del seleccionado argentino pretende aliviar, aunque sea en una mínima parte.
Además, Scaloni está muy conforme, lo mismo que sus dirigidos, con el piso del estadio de River Plate, que no tiene nada que envidiarle a los mejores clubes europeos, por lo que no quiere salir de allí, y si debe hacerlo como en este caso, al menos no tener que trasladarse en avión hacia el nuevo destino. Y este camino es el que finalmente transitará el representativo albiceleste desde el predio afista de Ezeiza a la Bombonera.