Colón ingresa en el tramo final de su preparación para el desempate ante Gimnasia de La Plata, del próximo viernes desde las 17, en el Coloso Marcelo Bielsa, donde se jugará en un mano a mano su permanencia en Primera División, tras una temporada para el olvido.

Colón llegó a Liniers para visitar a Vélez dependiendo de sí mismo para lograr el objetivo, ya que el triunfo le garantizaba su continuidad en la Liga Profesional, mietnras que el empate le aseguraba como mínimo un desempate ante Unión, y le hubiese significado a la luz de los resultados la salvación debido a la derrota del Lobo, que seguramente estará haciendo la especulación a la inversa.

La buena noticia para Israel Damonte tras el partido fue que no hubo jugadores suspendidos por amarillas, y el primer registro fue que tampoco había jugadores con lesiones tras ese duelo ante el Fortín que pusiera en riesgo sus presencias para el mano a mano frente a Gimnasia.

Es más, la expectativa radicaba en la chance concreta de que Eric Meza y Damián Batallini sean probados en la semana para determinar si podrán o no estar en condiciones de ser considerados para el choque frente a Gimnasia, debido a que se recuperan de sendas lesiones. El lateral derecho llegaría con lo justo y sería titular, en tanto que el volante ofensivo no estaría ni para el banco de suplentes.

Sin embargo, en las últimas horas se conoció que Javier Toledo sufrió una molestia muscular muy importante en el partido ante Vélez, que pone seriamente en riesgo su participación en el duelo ante Gimnasia, donde podría incluso hasta haber sido titular, a la luz de que llega de convertir y que venía de reemplazar en el segundo tiempo a Tomás Galván.

Así las cosas, Damonte se quedaría sin un importante jugador, por jerarquía y experiencia, para un partido que determinará la suerte de Colón en la próxima temporada del fútbol argentino. De todas maneras, el jugador pretende estar aunque sea ocupando un lugar en el banco de los suplentes.