El exdefensor sabalero que llegó a un grande del ascenso con una idea fija

Entusiasmado, Guillermo Ferracuti arribó al club con el objetivo de lograr el ascenso para San Martín

De cara a afrontar un 2024 con el ascenso como máximo objetivo, San Martín se propuso renovar drásticamente su plantel. En ese sentido, el apuntado por Diego Flores para reforzar el lado izquierdo de la defensa es Guillermo Ferracuti, quien terminó estampando su firma antes de finalizar el año 2023.

“Recibí el llamado del técnico y enseguida estuve interesado en venir. Tenía varias propuestas, pero cuando llegó la de San Martín no lo dudé”, aseguró en diálogo con LA GACETA.

El jugador de 32 años llegó al club proveniente de Deportivo Maipú, equipo en el cual disputó 29 partidos durante la última temporada. Fue titular a lo largo del torneo y se quedó a un paso de lograr el ascenso, luego de perder la final del Reducido ante Deportivo Riestra.

“Éramos un grupo humilde, sin un presupuesto alto como para ser candidatos. Pero trabajamos mucho, armamos una base y eso nos dio frutos”. En cuanto a su rendimiento, también se notó satisfecho. “Mi etapa en Deportivo Maipú fue una de las mejores. Solo me queda el sabor amargo de no haber podido ascender; hubiese sido la frutilla del postre”, se lamentó.

El “santo” finalizó esta semana la parte más intensa de la pretemporada y ya regresó a la provincia para continuar con los entrenamientos. “Me siento bien, contento. Estoy tratando de adaptarme al modo de trabajo del cuerpo técnico; de a poco vamos ganando ritmo”, afirmó Ferracuti.

El lateral izquierdo competirá directamente por un puesto con Nahuel Banegas, quien, por ahora, es el titular para Diego Flores. Sin embargo, admitió que puede ofrecer otras variantes desde lo táctico, si es que el técnico lo desea.

“En Maipú lo hice de lateral y también de stopper en una línea de tres, así que me siento bien en esas dos posibilidades. Diego (Flores) me dijo que me iba a utilizar más de ‘3’, pero que si me necesitaba de central también lo podía hacer”, detalló acerca de su lugar en la cancha.

Ferracuti posee una extensa trayectoria en el fútbol argentino. Tuvo oportunidades en Primera División y luego se estableció varios años en el ascenso, por lo que se trata de un gran conocedor de la categoría. “Siempre fue un torneo complicado, todos los equipos son difíciles. A San Martín le tocó una zona bastante fuerte; hay varios equipos de renombre”, advirtió. Además, planteó que el fútbol del ascenso está evolucionando, con la aparición de herramientas que antes eran poco comunes. “Me acuerdo que cuando estaba en Patronato en 2014 no se hacían tantos análisis de los rivales. Ahora el cuerpo técnico cuenta con varios videoanalistas que saben los defectos y las virtudes de cada equipo”, confesó.

Dentro de la complicación que representa cada mercado de pases para los equipos tucumanos, dado a que los jugadores se rehúsan a tener que distanciarse cientos de kilómetros de sus familias, en San Martín tienen un plus. La pasión y la efervescencia con la que se viven los partidos en La Ciudadela generan como resultado una desafiante atracción para los futbolistas que vienen de afuera.

“Vine a jugar dos veces y se siente mucho lo que es la gente, como empuja. Se puede llegar a sentir cierta presión pero se lo maneja con profesionalismo y trabajo duro”, aseguró con confianza.

Es que claro, aún con todas las propuestas sobre la mesa, Ferracuti siempre lo tuvo claro. “Lo que me seducía a venir es que es uno de los clubes más grandes de la categoría, sin dudas. Cuando se juega acá, el entorno se siente como un partido de Primera División”, afirmó con entusiasmo.

El defensor ya sabe lo que significa lograr un ascenso. Lo consiguió en 2014, cuando jugaba en Colón de Santa Fe. Sin embargo, Ferracuti no piensa vivir del recuerdo. Automáticamente, estableció la meta para este año. “San Martín es un club grande, por lo que la aspiración es ascender; es mi primer y único objetivo”, concluyó convencido, con la motivación necesaria para ganarse un lugar rápidamente entre los preferidos de Diego Flores.