La Argentina volvió a reclamar ayer una reforma de los organismos multilaterales y rechazar las recetas del Fondo Monetario Internacional (FMI) para superar la crisis económica de la Unión Europea (UE). Así lo señaló en México el canciller Héctor Timerman, quien participa de un encuentro de cancilleres del Grupo de los 20 (G-20), encuentro al que se sumarán este jueves y viernes el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, y la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont.

Timerman sostuvo que mientras el FMI y el Banco Mundial recomiendan responder a la crisis con más austeridad y a los problemas de desempleo con más flexibilidad laboral, los trabajadores y los ciudadanos en el mundo no perciben estas soluciones como “adecuadas”.

El encuentro es preparatorio para la cumbre de Jefes de Estado del G-20 que tendrá lugar en México en junio, donde la Argentina tendrá que fijar posición nuevamente sobre el escenario económico mundial, pero a la vez enfrentar críticas. Dirigentes de varios países centrales hicieron conocer en los últimos meses su rechazo a medidas argentinas como los controles a importaciones, la poca confiabilidad de sus estadísticas y la negativa a aceptar las revisiones del FMI del Capítulo IV.

Según informó el Gobierno de México, la agenda de estos encuentros preparatorios tiene como puntos: la recuperación de la estabilidad económica y el crecimiento y el fortalecimiento las instituciones financieras internacionales. También se discutirá sobre cómo mejorar los sistemas financieros, incluyendo medidas para ampliar la inclusión y educación financieras; mitigar la volatilidad de los precios de los alimentos e impulsar una estrategia de crecimiento verde.

El encuentro entre ministros de Economía y presidentes de Bancos Centrales, sirve como preparativo para la cumbre de presidentes del G-20 que se desarrollará entre el 18 y 19 de junio próximo, en la ciudad mexicana Los Cabos. Según trascendió, y pese a la intención de los países miembros, la agenda estará dominada por la crisis de deuda europea, en particular de Grecia, que se encuentra caminando por la cornisa del default.

Timerman aprovechó su espacio para volver poner en tela de juicio el sistema de decisiones de la Organización de las Naciones Unidas, en lo vinculado al sistema de vetos de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, Estados Unidos, Inglaterra, Francia, China, y Rusia.

Participan de la cumbre de cancilleres los países miembros del G-20 la anfitriona Patricia Espinosa, canciller de México; Hillary Clinton, secretaria de Estado de los Estados Unidos; Guido Westerwelle, canciller de Alemania; Tsuyoshi Yamaguchi, canciller de Japón, y otros ministros de Relaciones Exteriores de países invitados por la Presidencia mexicana.