El delantero colombiano de River, Miguel Borja, arrancó la semana con cuidados para intentar llegar al domingo y ser parte del superclásico con Boca Juniors, a pesar del desgarro en el aductor izquierdo que sufrió la semana pasada en el partido con Atlético Tucumán.

Si bien los tiempos médicos indicarán que el domingo se habrán cumplido "sólo 10 días desde la lesión", el grado menor del desgarro y la capacidad en la recuperación física del jugador le abren una remota posibilidad a su presencia.

Por eso, el propio DT, Martín Demichelis, aseguró en conferencia de prensa luego del empate 1-1 con Banfield que era "optimista" en su regreso y anticipó: "Va a ser la novela de la semana y lo vamos a acompañar para que se meta en la pelea".

Borja, hasta su lesión, era el mejor jugador del equipo, con 462 minutos desde el arranque, con 6 partidos jugados y 7 goles anotados

El atacante no pudo sostener la efectividad de -al menos un gol por partido- luego de la negativa de su compañero Esequiel Barco a cederle el penal que finalmente pateó a las nubes el exjugador de Independiente, en el 0-0 del miércoles pasado con los tucumanos.

La alternativa que juegue Borja se mantendrá toda la semana, mientras que también existe la posibilidad de un cambio de sistema como contra Banfield y que juegue un volante más. O en su defecto que ingrese Pablo Solari, autor del gol del empate 1-1 en el choque con el 'Taladro'.

Por otro lado, Matías Kranevitter y Manuel Lanzini intensificarán esta semana sus labores de recuperación, a partir de sendas lesiones que presentan. Ninguno de los dos adquirió minutos oficiales en lo que va de la temporada, a raíz de molestias musculares que presentaron en la previa del comienzo del campeonato.

Kranevitter estuvo afectado por un desgarro en el recto anterior derecho en las horas previas al debut con Argentinos Juniors (1-1). Mientras que Lanzini se lastimó el isquiotibial derecho en el amistoso con Pachuca en el final de la pretemporada en los Estados Unidos y todavía aguarda por el alta médica.

A la vez, Santiago Simón, quien tiene una fractura en la mano, sigue con las tareas aeróbicas a la espera que le otorguen el alta médica y apuntar al inicio de la Copa Libertadores, en abril próximo.

Con este panorama, el equipo tendrá descanso mañana para regresar a los entrenamientos el miércoles en la recta final de la semana, de cara a la concentración del sábado con vistas al clásico del domingo.

El plantel se entrenará desde esta martes, en horario matutino, en el River Camp hasta el viernes, cuando el entrenador empiece a delinear el equipo titular que -de todos modos- recién se conocerá el domingo, en las horas previas al comienzo del choque con Boca