El rugby piensa en cambios drásticos en el reglamento
La World Rugby analiza realizar varios cambios estructurales en el deporte: menos tiempo en las formaciones fijas y cambios en el uso de la tecnología o los duelos de patadas, entre otros.
El rugby es un deporte que en los últimos años se ha tornado particularmente obsesivo con ciertas reglas, a veces atentando contra el fluir del juego. El exagerado empeño en proteger a los jugadores también ha enlentecido varias situaciones, en particular las formaciones fijas. Consciente de ello, la World Rugby analiza numerosas modificaciones en el reglamento que podrían generar un enorme impacto y que serán debatidas el próximo 9 de mayo. Entre las más destacadas están los cambios en las expulsiones, las modificaciones y el uso de la tecnología.
En las expulsiones reside un cambio que podría ser esencial. Actualmente, cuando un jugador recibe una tarjeta roja, el equipo se queda automáticamente con un jugador menos hasta el final del compromiso, como sucede en la mayoría de los deportes. Pero es cierto que en el rugby es, tal vez, en donde más notoria se hace la diferencia numérica. Por eso, la World Rugby considera proponer una expulsión que implique la ausencia del infractor durante 20 minutos. Una vez cumplido ese lapso, si bien quien fue sancionado no podría regresar al juego, sí podría hacerlo un sustituto. Esto asemejaría la expulsión más a una tarjeta amarilla, que actualmente provoca que el jugador amonestado abandone el juego durante 10 minutos.