Javier Toledo fue uno de los protagonistas de la derrota de Colón ante Talleres, ya que fue expulsado en el final y se fue muy enojado con el arbitraje de Nicolás Ramírez, como todos los integrantes del plantel.

Luego del partido, Toledo destacó que "se hizo un gran segundo tiempo, estando abajo, no se pudo. Pero si analizamos bien el partido ellos tuvieron el cabezazo". 

Y destacó sobre la roja que le sacó Ramírez que "mi expulsión fue una reacción en caliente, son cosas del partido, queda ahí, es para aprender".

"Si te pones a analizar las cortitas, -continuó sobre el arbitraje de Ramírez- para nosotros era amarillas, para ellos nada. A Talpone le pegaron desde atrás, no se puede hablar. De lo mío me hago responsable, reaccioné mal con el rival, mala suerte, quedamos afuera, entrenar y pensar en lo más importante que es el domingo", agregó el goleador de Colón.

En tanto que sobre las respuestas futbolísticas del plantel, afirmó "quedó reflejado que no hubo mucha diferencia, le jugamos de igual a igual al mejor equipo del fútbol argentino, están jugando Copa Libertadores, no queda otra que pensar en el domingo".

"A los chicos que les tocó jugar aprovecharon la posibilidad, hay que traernos los tres puntos desde Madryn para terminar punteros. Sabemos que tenemos a un punto a San Telmo, ojalá que podamos ganar en Madryn", cerró Toledo.