Desde el día que renovó su contrato, todo hacia pensar que en el mercado de pases Federico Vera se iba a ir de Unión mediante una venta. Sobre todo, después de que el club rechazara varias ofertas. Un compromiso de "palabra" en caso de que llegue algo formal y que le sirva a todas las partes.

Si bien tiene una cláusula de rescisión de 800.000 dólares, sería para equipos del exterior y por "códigos del fútbol", una negociación a parte con clubes argentinos. Por eso el Tate estaría pidiendo una cifra superior al 1.000.000 de dólares y el más interesado sería Boca, que en las últimas horas habría reactivado sondeos concretos.

Pero el apremio sería mayor, ya que el DT Diego Martínez lo quiere para ser una opción también para la Sudamericana a raíz de los lesionados y el plazo para anotarlo es hasta este viernes 12, por lo que debe cerrarlo por estas horas.

En Buenos Aires informan que "habría una deuda de Unión" y, una vez que se resuelva, se liberará. Algo que generó impacto en Santa Fe. Asimismo, también se menciona la alternativa de que ingresen jugadores en la operación, como Vicente Taborda, Juan Ramírez o Norberto Briasco. 

Un Vera que sigue en Funes haciendo la pretemporada, pero esperando novedades para viajar a Buenos Aires. Prácticamente tiene las valijas armadas. Momentos decisivos para su transferencia a Boca.