El increíble crecimiento de Krejcikova, nueva reyna de Wimbledon
El resurgir de una campeona, podría describir la carrera la checa, quien se acaba de coronar como la nueva campeona del Grand Slam tras vencer por 6-2, 2-6 y 6-4 a la italiana Jasmine Paolini (7ª)
El resurgir de una campeona... así se podría describir la carrera de Barbora Krejcikova (32ª del ranking WTA), quien se acaba de coronar como la nueva campeona en Wimbledon tras vencer por 6-2, 2-6 y 6-4 a la italiana Jasmine Paolini (7ª).
Se la podría considerar como una tenista completa, que domina tanto la modalidad de singles como dobles, pero en el último tiempo, sobre todo cuando tiene que pisar la pista en soledad, es cuando más se ha notado su ausencia. Desde que salió campeona en Roland Garros 2021, la checa no logró hacer una buena actuación en otro Major. De sus últimas 12 participaciones, solo llegó a tres cuartos de final (Australia '22, '24 y US Open '21), algo que de a poco la fue quitando del Top 10 en singles.
Si bien siguió consiguiendo destacados títulos, como el WTA 1000 de Dubai y el WTA 500 de Ostrava, curiosamente ambos ganados ante Iga Swiatek (1ª), lo que llama la atención fue su bajo rendimiento en los torneos de Grand Slam. Sin embargo, no hay que dejar de lado la importancia que le dio al dobles en estos tipos de torneos donde cosechó cinco consagraciones desde el Abierto de París 2021 (RG '21, si ganó ambos en esa edición; Australia 22 y 23; Wimbledon '22 y US Open '22). Todos junto a su compatriota Katerina Siniakova (36ª).
De todas formas, en este 2024, las cosas no se dieron en ninguna de las dos modalidades. Apenas una final del WTA 1000 de Madrid fue lo máximo que consiguió, y en lo que al singles respecta, ni a una instancia decisiva pudo llegar. Además, como para destacar su proeza en el certamen inglés, llegó a la gira de césped sin haber ganado un partido desde febrero. Ese último encuentro ganado fue ante Sara Sorribes Tormo (55ª) por abandono de la española. Luego tuvieron que pasar cuatro meses hasta ver la luz del triunfo en singles.