Los secretos de un hacker profesional para protegerte en Internet

Varias cosas a tener en cuenta para no ser víctima de un ciberataque.

NO hagas esto cuando navegas por Internet

Es innegable que los ordenadores y portátiles forman parte de nuestra vida cotidiana, al menos, para una gran mayoría. Desde enviar emails, ver vídeos en Youtube, hasta hacer compras online o incluso realizar operaciones bancarias: el mundo de la tecnología llegó hacia varias décadas para quedarse. 

Pero, ¿hacemos realmente todo lo posible para proteger nuestros datos personales cuando navegamos por la red? Hemos hablado con un hacker profesional que ha compartido con nosotros sus conocimientos, trucos y consejos. Nos advierte de los mayores errores y nos revela sus mejores consejos contra el robo de datos para poder navegar por Internet de forma segura.

Nuestras emociones pueden meternos en problemas

La mayoría de las estafas modernas contienen un elemento que se conoce como "ingeniería social". Es decir, una persona que tenga intención de robar online, sabe cómo jugar con las emociones humanas para poder ejecutar sus actos delictivos. Por ejemplo, puede hacerte creer que alguien está en un aprieto para que, de ese modo, hagas clic en uno de los enlaces que habrá insertado en su email "trampa". Esto se podría comparar con esa estafa que ponía como gancho a una mujer embarazada que llamaba a tu puerta. 

No creas que todos los emails son auténticos

No hagas clic en los enlaces de los correos electrónicos. Visita siempre directamente la página web en el buscador web en vez de abrir esos enlaces en el correo. 

Demasiada sinceridad

"¿Dónde naciste?" o "¿A qué colegio fuiste?" son preguntas habituales que se usan en varias páginas web para garantizar que tu cuenta esté a salvo de intrusos en todo momento. Pero, lamentablemente, estas respuestas no siempre son tan seguras como puedes pensar. ¿Por qué? Bueno, bien sabrás que hoy en día es fácil encontrar información de otras personas investigando un poco online. Es decir, cualquier persona que se ponga a investigar podría, tal vez, adivinar en qué ciudad naciste o incluso descubrir a qué colegio fuiste. Por este motivo, el consejo a seguir en este caso es que siempre nos inventemos las respuestas. No hace falta que sean verdad, lo importante es que solo tú mismo puedas conocer esas respuestas.

Compartes demasiada información...

No compartas información personal en ninguna página web o red wifi pública a menos que necesiten saberlo por una razón muy importante. Por ejemplo, si te registras en un punto de acceso wifi público, te pedirán tu nombre, fecha de nacimiento y dirección. No existe ninguna obligación legal que diga que debes dar tus datos reales, así que no pasa nada si respondes de forma creativa – y mantienes a salvo tus datos reales. 

...sobre todo en redes sociales

Cuanta más información personal compartas en Internet, más accesibles serán tus datos para alguien que quiera usarlos. La próxima vez que entres en tu cuenta de las redes sociales, asegúrate de que la información que compartes es mínima. Tus familiares y amigos ya conocen tu número de teléfono, fecha de nacimiento y dirección de correo electrónico, así que no hay necesidad de divulgar estos datos. Si tu privacidad es importante para ti, no compartas información innecesariamente. Y lo más importante, no publiques en línea que te vas de viaje, ya que esto podría poner en peligro tu hogar. 

Nuestros perfiles en las redes sociales suelen ser demasiado públicos

En tu cuenta de Facebook, si accedes a través de tu ordenador, tendrás que dirigirte al icono con tu foto de perfil en la esquina superior derecha. Ahí verás la opción de "Configuación y privacidad". En esta sección podrás gestionar tu perfil de Facebook. Es recomendable que elijas las opciones "Solo yo" o "Amigos" en opciones como: "personas que tienen tu dirección de correo electrónico" o "quién puede ver tu lista de amigos". 

En la foto, puedes ver que a la izquierda está la opción de "Comprobación rápida de privacidad". Si haces clic, te llevará a una nueva ventana en la que, de un solo vistazo, podrás ver quién tiene acceso a qué, en toda tu cuenta de Facebook: quién puede ver tus publicaciones, quién puede enviarte solicitudes de amistad, etc. 

Este mismo proceso, puedes llevarlo a cabo en otras redes sociales como X (antiguo Twitter). Es siempre recomendable entender bien la privacidad de tus cuentas en redes sociales para mantener tu seguridad en todo momento. 

Cuidado con las apps "gratis"

Los hackers pueden descargar programas espía en tu dispositivo a través de aplicaciones. Antes de instalarlas, comprueba los permisos de las aplicaciones para asegurarte de que no almacenan información personal innecesaria. Por ejemplo, una aplicación para un juego no necesita acceder a tu información de red ni a tu lista de contactos. Es mejor prevenir que curar. Actualiza regularmente tus aplicaciones para verificar que no haya problemas de seguridad. 

No borramos el historial del navegador

Este consejo es muy importante si vas a utilizar el mismo dispositivo que otra persona, por ejemplo, en el equipo de la oficina o el iPad de un amigo. Navegadores como Chrome y Firefox guardan un registro de lo que has buscado en Internet y de los sitios que has visitado. Esta información puede conservarse durante semanas, por lo que si no borras el historial de navegación cualquier persona en contacto con el dispositivo puede robar tu historial y acceder a información personal. Cuídate y bórralo. 

Qué necesitas tener instalado

Los productos de seguridad más importantes que debes utilizar son un software antivirus, que escanea regularmente para detectar cualquier anomalía, y un bloqueador de anuncios, que impidirá que elementos innecesarios se abran paso en tu escritorio. Algunos de los mejores programas antivirus son Norton Security, McAfee Total Protection y Kaspersky Total Secure. Vale la pena echar un vistazo para ver qué programa se adapta mejor a tu escritorio. 

No uses siempre la misma contraseña

El consejo más importante es que nunca utilices la misma contraseña dos veces. Si se compromete una cuenta, se comprometen todas tus cuentas.

Utiliza un gestor de contraseñas...

Al utilizar un gestor de contraseñas, todo lo que tienes que hacer es recordar una contraseña (junto con una pista personal) que te permitirá guardar muchas contraseñas más complejas en un entorno seguro. Un experto en la materia afirma que un pirata informático puede tardar hasta dos años en descifrar una contraseña compleja de ocho caracteres creada por un gestor de contraseñas. 

Establece una capa adicional de seguridad (parte 1)

Es aconsejable configurar la autenticación de dos factores (o 2FA) en todas tus cuentas importantes. Se trata de una capa adicional de seguridad que no sólo requiere una contraseña y un nombre de usuario, sino algo más: algo que tú, y sólo tú, tienes. 

Establece una capa adicional de seguridad (parte 2)

Esta segunda capa puede ser otro dato que solo tú conozcas, un llavero o lector de tarjetas, o seguridad biométrica como tu huella dactilar, tu voz o el iris de tu ojo. Utilizar un nombre de usuario y una contraseña junto con un dato que sólo tú conozcas dificultará que los piratas informáticos accedan a tu información personal y la roben. Tu banco puede proporcionar esto para tu cuenta online, a través de hardware junto a tu tarjeta y PIN. 

Mantén actualizada tu seguridad

Para garantizar la seguridad de tus dispositivos, lo mejor es instalar un software antivirus, pero si no actualizas el software cuando lleguen nuevas actualizaciones, tu seguridad se verá comprometida. Asegúrate de utilizar la última versión de tu navegador web e instala las actualizaciones de software en cuanto estén disponibles. La tecnología avanza rápidamente, así que cuanto más reciente sea una actualización, mejor protección tendrás.  

Cuidado con el uso de Wi-Fi públicas

Es posible que hayas oído alguna vez que no debes realizar operaciones bancarias por Internet ni realizar ningún tipo de operación importante si estás usando una red Wi-Fi pública. ¿El motivo? Hay unos cuantos problemas que podrían rodear a una red Wi-Fi pública. La apertura de la red puede permitir fácilmente la entrada de intrusos, la red puede haber sido atacada y estar llena de malware y estar comprometida.

Comprueba a menudo tus cuentas

Revisa tus cuentas bancarias y transacciones de tu tarjeta de crédito con frecuencia (lo mejor es hacerlo a diario) para estar al tanto de cualquier transacción inesperada. Puedes suscribirte a alertas que se enviarán a tu correo electrónico o teléfono móvil en caso de que haya transacciones inusuales.

¿Qué medidas ofrece tu banco para protegerte?

Familiarízate con la garantía de protección contra el fraude de tu banco. Algunos grandes proveedores ofrecen cero garantías para las tarjetas de crédito y débito, mientras que otros ofrecen protección gratuita para las transacciones bancarias por Internet. Si consultas a tu banco antes de utilizar la banca electrónica, o incluso antes de abrir una nueva cuenta, estarás protegiéndote mucho mejor.