Es imposible no darle mérito a Carlos Duro de esta conquista de Boca en la Liga Nacional. Él fue el encargado de armar el equipo que consiguió esta hazaña y cada uno de los jugadores que habló con la prensa remarcó la importancia del entrenador en este conjunto y que el título obtenido también es suyo. Sin embargo no tuvo un gran primer semestre de la temporada 23/24 y, a principios de abril, fue destituido de su cargo en el Xeneize.

A partir de ahí Gonzalo Pérez tomó el mando y se creía que dirigiría los próximos partidos del club tras la destitución de Duro, así lo explicó el comunicado oficial de Boca. Sin embargo el Polaco empezó a ganar partidos y el conjunto azul y oro tomó un buen rumbo. Agarró al conjunto porteño en la novena posición de la tabla y, al finalizar la fase regular, terminó en el top 4, logrando el pase directo a los cuartos de final.

Fue un récord de 17-12 el que tenía Carlos Duro antes de irse del Xeneize. Boca terminó la fase regular con un 24-14, por ende el récord personal de Gonzalo Pérez fue de 7 victorias contra 2 derrotas. La cosa mejora si contamos los partidos de playoffs. Allí ganó 10 juegos y perdió 5 (1 contra San Lorenzo, 2 contra Quimsa y 2 contra Instituto) finalizando con un balance de 17-7, las mismas victorias que Carlos pero con 5 derrotas menos, y muchas de ellas en playoffs donde evidentemente el nivel sube y las posibilidades de perder se incrementan.