Dilma vuelve a mover el gabinete: releva ministro responsable de la reforma agraria
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, echó a Alfonso Florence, ministro de Desarrollo Agrario, luego de que 2011 fuera el peor año para la reforma agraria en el país desde 1995, con 22 mil familias asentadas en tierras productivas. Es el duodécimo cambio ministerial que realiza Rousseff desde que asumió el poder el 1 de enero de 2011.
En un comunicado, Rousseff agradeció a Florence por los servicios prestados, sin realizar ninguna crítica, y nombró a Gilberto José Pepe Vargas, exintendente de la ciudad agrícola de Caxías do Sul, en el estado de Río Grande do Sul y diputado del Partido de los Trabajadores.
Los movimientos sociales a favor de la reforma agraria se quejaban del ministro Florence por la lentitud de la aplicación de la distribución de tierras. Según Pepe Vargas, el principal objetivo de su convocatoria será eliminar los bolsones de miseria en el campo brasileño.
El año pasado, el Gobierno brasileño repartió tierras al menor número de familias sin títulos en los últimos 16 años, según un informe del diario Folha de Sao Paulo divulgado en febrero.
Brasil, el país con mayor extensión y habitantes de Latinoamérica, registra un grave problema de concentración de tierras. Un 1% de los propietarios dispone del 45% de las tierras cultivables, según el censo agrario.
Los movimientos campesinos aseguran que existen cuatro millones de familias sin tierra y que 200.000 viven en campamentos sin infraestructura. El gobierno reconoce que unas 180.000 familias están en la lista de espera para recibir un predio.
Brasil tiene dos ministerios dedicados al campo y a la producción de alimentos. El de Desarrollo Agrario, a cargo de la agricultura familiar y la reforma agraria, y el de Agricultura y Ganadería, que se ocupa de la producción extensiva de los grandes players del mercado internacional de granos y carnes.