Djokovic, recibido por 100 mil personas en Serbia tras la dorada en París 2024

Junto con otros atletas, el tenista fue homenajeado en Belgrado y dio un discurso ante la multitud, acompañado por el presidente de su país.

Después de haberse alzado con su primera medalla dorada los Juegos Olímpicos de París 2024, el serbio Novak Djokovic regresó a su país y, ante 100 mil personas, celebró el hito en Belgrado como un verdadero héroe junto a otros atletas.

En el polvo de ladrillo de Roland Garros, Nole se sacó la espina y se convirtió en campeón olímpico por primera vez en su carrera, al vencer al español Carlos Alcaraz en la final. Así, ante una increíble multitud, el tenista se paseó primero en auto y luego dio un discurso en conjunto con otros atletas destacados en París 2024 y el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic.

"Entré a los Juegos Olímpicos sin ningún título durante la temporada y con una lesión a cuestas. Muchos cuestionaron la calidad de mi tenis, pocos me consideraban favorito. Pero yo secretamente creí. Sabía que probablemente esta fuera mi última chance de ganar el oro. Ha sido uno de mis mejores torneos, no perdí un set. Sentí el apoyo de la gente. Sin falsa modestia, este es mi logro deportivo más grande. Traigo orgullosamente la medalla dorada a Serbia", declaró, ante los 100 mil compatriotas que lo recibieron.

Serbia y unos Juegos Olímpicos de París 2024 para la historia

El logro de Novak Djokovic, que ganó la medalla dorada en tenis individual por primera vez en su carrera a sus 37 años, no fue el único para Serbia, que tuvo unos Juegos Olímpicos de París 2024 para los libros de la historia. Es que, en total, el país acumuló cinco medallas.

Además de Djokovic, Zorana Arunovic y Damir Mikec se alzaron con la medalla dorada en pistola 10 metros por equipos mixtos, mientras que el equipo masculino de waterpolo alcanzó el mismo hito en su disciplina. En tanto, Aleksandra Perisic se quedó con la plateada en taekwondo (-67 kg femenino), y el equipo masculino de básquet logró la medalla de bronce, de la mano de Nikola Jokic.