Tigre jugó un enorme partido en Parque Patricios y venció por 2-0 a Huracán con goles de Blas Armoa y Florian Monzón por la fecha 13 de la Liga Profesional.

Con el ingreso de Moreno en lugar del lesionado Banegas, Tigre se presentó en el Ducó con el objetivo de sumar. En el inicio, fue Huracán el que dictó los tiempos y tomó la iniciativa, con un Matador que esperaba en campo propio y trataba de no desesperarse. Más allá de algunos centros cruzados, el local no inquietó con peligro a Zenobio en los primeros 20'.

Y en la primera que tuvo, Tigre no perdonó. De un pelotazo que parecía inofensivo, Armoa quedó solo frente a Galindez y la pinchó para el 1-0. El Matador comenzó a incurrir en el juego brusco y Rey Hilfer cobraba todo en favor de Huracán, que solo lograba acercarse mediante tiros libres.

Huracán movió el banco para el segundo tiempo y la cancha era un hervidero. Al árbitro se le fue el partido de las manos muy rápido y cada falta era una ceremonia de protestas. Tigre aguantaba en su campo y buscaba que Huracán se pusiera nervioso y que así dejara espacios.

A los 20', Romeo Benítez ingresó a la cancha en lugar de Armoa para darle frescura al costado derecho del ataque. Huracán no podía y Tigre jugó perfecto sin pelota, esperando agazapado para dar el golpe. Y lo dio. A los 33', Galván ganó un córner y de ese tiro, Monzón conectó de cabeza para el 2-0.

El Matador se dedicó a cuidar el marcador y redondeó un partido perfecto para conseguir un triunfo que se festeja y mucho. Con este resultado, Tigre llegó a los 21 puntos y quedó dos abajo de Sarmiento e Independiente Rivadavia y cinco por encima de C. Córdoba que aún debe jugar.