A fines de agosto el fiscal de Instrucción del Distrito 1, José Mana, firmó el decreto de sentencia, tras considerar que existen indicios de peligrosidad procesal, tanto de fuga como entorpecimiento por parte del imputado, quien fue acusado del delito de homicidio calificado por alevosía y mediando violencia de género.

“No vamos a apelar la prisión preventiva dictada contra Soto”, anunció Schönfeld. A su vez, señaló que por el momento no se podrá tener acceso a la estrategia de defensa.

Según explicó la fiscalía, "es clara la posición de superioridad que ejercía Aguilar Soto sobre su víctima, como así también la violencia psicológica y simbólica que aplicó hasta el momento mismo de quitarle la vida a su amiga por despecho".

Durante su indagatoria, se supo que el acusado, en un testimonio breve, confesó el crimen y se mostró “arrepentido”.

"Yo la maté, le arruiné la vida, me arruiné la vida, arruiné la vida de nuestras familias y estoy muy arrepentido", señaló el sospechoso de 21 años, que era un amigo muy íntimo de la víctima.

A un mes del femicidio, el papá de Catalina habló y expresó el dolor que siente: “Estamos destruidos, tratando de salir adelante”.

Sobre el acusado,  Marcelo Gutiérrez sostuvo: “Quiero que sufra el doble de lo que estamos sufriendo nosotros”.

“Ni un animal es capaz de hacer algo así. Después de cometer semejante hecho horroroso, ir a abrazar a la madre de una persona que vos mataste, queriendo engañar a todos”, expuso.