El tercer ciclo -interino- de Mariano Herrón en Boca ya es una realidad. El lunes pisó la cancha principal del predio de Ezeiza y, con silbato en mano, se puso al frente del plantel para volver a cubrir ese espacio que el Consejo de Fútbol pretende llenar en breve con Fernando Gago, quien está a un paso de ser el nuevo DT. Y no perdió el tiempo. Después de los trabajos regenerativos del primer encuentro, al día siguiente ya paró un equipo pensando en Argentinos y le imprimió su sello metiendo cinco cambios.

Si bien mantuvo el esquema de 4-4-2 que venía utilizando más a menudo el otrora técnico del Xeneize en el último tiempo, lo cierto es que movió varias piezas en relación a la formación que cayó con autoridad ante Belgrano el sábado pasado, aunque hay que hacer un asterisco: Edinson Cavani trabajó diferenciado para seguir con la recuperación y por eso no estuvo en el once, lugar que ocupó Milton Giménez.

Sacando la situación particular del goleador y seguramente nuevamente capitán el próximo domingo contra el Bicho, que será titular, Herrón pudo contar con los retornos de Luis Advíncula tras la molestia en el tendón de Aquiles y además también sumó de arranque a Cristian Lema, teniendo en cuenta que ya cumplió la sanción y estará disponible para jugar. Juan Barinaga y Nicolás Figal les dejaron su lugar.

En el mediocampo, el flamante DT interino también hizo varios retoques: Sin Cristina Medina por la lesión en el gemelo, incorporó al recientemente recuperado Brian Aguirre como volante por la izquierda (posición en la que lo supo poner Martínez en sus primeros partidos como jugador de Boca) y cambió a Milton Delgado por Ignacio Miramón. ¿La otra curiosidad? A Kevin Zenón lo probó por derecha, a pierna cambiada.

Miguel Merentiel no se toca y estuvo en el frente de ataque en el entrenamiento del martes, compartiendo el doble nueve circunstancialmente con Giménez por el caso ya mencionado de Cavani. De no mediar imprevistos, se perfila medio equipo nuevo de Boca para el debut de Herrón que marcará el reencuentro con la gente en La Bombonera en medio de un momento complejo.