Colón otra vez falló ante un rival directo en un momento cúlmine
Además de la falta de respuestas anímicas ante la adversidad, el Rojinegro volvió a claudicar contra un adversario que pelea por lo mismo. Una cosecha que se paga en la tabla
En Colón perdura la bronca por la derrota como local ante San Telmo. No solo por ser en casa sino más que nada por los resultados que se dieron en la fecha, que pudieron dejarlo a tiro de la cima. En pocas palabras, se perjudicó solo y lo paga en la tabla, donde marcha séptimo y lejos de aspirar a la cima por más que matemáticamente haya chances todavía.
Quedó claro, una vez más, que no tiene respuestas anímicas para reponerse a la adversidad. Cada vez que empezó perdiendo, no lo pudo dar vuelta. Solo una vez pudo conseguirlo. Es decir, cada golpe no lo asimila y queda derrumbado. Lapidario para un equipo con aspiraciones superiores.
A eso hay que agregarle la falta de capacidad ante rivales directos. Esto es otro aspecto que le pasa factura en la cosecha. Perdió los dos partidos contra San Telmo; cayó con Nueva Chicago de visitante y empató de local; contra Defensores de Belgrano fue uno y uno; frente Aldosivi igualó en Santa Fe y cayó de visitante; con Gimnasia de Mendoza también ganó en el Brigadier y perdió en la ruta; y empató en el Sur con Deportivo Madryn, con quien jugará en la última jornada en el Cementerio de los Elefantes.
Colón, por más que cueste asimilarlo en los hinchas, no estuvo a la altura en los momentos cruciales y por eso vio desmoronarse la campaña. Todavía puede levantarse, pero el tema es ver con cuánto hilo en el carretel para ir por el ascenso.