Si hay clásico cordobés en la Liga Nacional, gana Instituto. No hay vuelta que darle. Es una fija. En el nuevo estadio de barrio General Bustos, a pleno, cargado de fervor de parte de las dos hinchadas, la Gloria fue más y superó a Atenas por 87 a 74 en la vuelta del duelo del básquet de Córdoba, 552 días después.

Desde que Instituto volvió a la Liga Nacional en 2015, ganó 22 de los 28 enfrentamientos con el Verde (incluido el Súper 20). En el historial total, manda el Albirrojo con 21 ganados contra 11 del Griego.

Los clásicos son partidos apartes pero este expuso las diferencias de plantel de los cordobeses. La Gloria, completo (aún cuenta con una ficha mayor) está armado para pelear el título y jugar la Champions. Puesto por puesto, la diferencia es notoria entre un plantel y otro

Al Verde, con la ausencia de Nicolás Zurschmitten y una ficha mayor todavía sin usar, le cuesta el regreso a la máxima categoría, tras consagrase en la Liga Argentina. Encima no pudo debutar el español Toni Vicens porque sigue sin destrabarse su habilitación. Y para sumar males en barrio General Bustos, Carlos Buemo que se mostraba como uno de los puntales ofensivos en el clásico fue descalificado a los 4′30 del segundo cuarto por dos faltas técnicas.

Igual, no se la hizo fácil Atenas a Instituto, principalmente en el tercer cuarto. Viniendo de atrás en el marcador, el equipo de Peirone encendió las alarmas en la Gloria cuando achicó a 4 (48-52) en poco más de cinco minutos. Fue el llamado de atención que necesitaba el Albirrojo.

El dueño de casa peleó para estar cerca. Cuando Instituto jugó marcó diferencias. Pasó de grandes momentos a otros de dudas y por eso no quebró el clásico hasta el cierre.

Bautista Lugarini fue el mejor del Albirrojo y del partido. Cuando la pelota pasó por el ala-pivote rosarino, Instituto justificó su superioridad para festejar una vez en el clásico. “Bauti” sobresalió con 18 puntos. Alex Negrete, de gran último cuarto, aportó 13 tantos.

Juan Cruz Oberto fue el abanderado de Atenas, a puro esfuerzo, corazón y energía. El pivote de Las Varillas dejó la vida y colaboró con 19 puntos y 8 rebotes.