Real Madrid volvió a las remontadas por Champions con triplete de Vinicius
El delantero brasilero aportó tres goles para la goleada 5-2 ante Borussia Dortmund, en la reedición de la final pasada. Lo ganaba el equipo alemán 2-0 y lo dieron vuelta.
El Real Madrid de las remontadas por Champions League reapareció en el Santiago Bernabéu cuando se veía abocado a una situación límite, cayendo 0-2 al descanso ante el Dortmund tras la derrota de Lille, con una reacción repleta de orgullo al ritmo de Vinícius, autor de tres de los cinco goles que marcó en el segundo tiempo el campeón de Europa, junto ante el rival de la final pasada.
Sentía el Borussia Dortmund la 'vendetta' de la final de la Champions, su primera conquista del Santiago Bernabéu. Parecía encaminado a una profunda reflexión futbolística el Real Madrid, cuando en una segunda parte majestuosa se quitó todas las ataduras. El fútbol que tanto se le demandaba apareció en oleadas para remontar dos goles y tapar sus carencias. Un vendaval futbolístico que no hay rival que lo sostenga en el Bernabéu cuando ruge.
No era un día para pruebas tácticas por la necesidad. Enterró Ancelotti su apuesta de Balaídos y recuperó el 4-3-3 con el regreso de Rodrygo al once. Obligado a recurrir a un jugador de 39 años en búsqueda del fútbol de calidad que no encuentra. Escoltado Modric en el doble cinco por Fede Valverde, que no es suficiente por mucho que robe, y con Jude Bellingham desgastándose detrás de la pelota para perder la frescura del pasado curso en ataque.
Las obligaciones eran madridistas. El Dortmund llegaba al Bernabéu con la liberación que le otorgaban dos triunfos. Sin nada que perder. Impulsó la valentía de Sahin que supo leer las flaquezas del momento del Real Madrid y explotarlas. Buscó con éxito la debilidad de sus laterales y Guirassy trajo de cabeza a los centrales. Un buen manejo del partido hasta que le entró el miedo con ventaja.
En el arranque se vio a un Real Madrid motivado, más intenso, consciente de lo que se jugaba, con determinación desde la primera acción. Lo que aumenta la preocupación cuando no le da para hacer temblar al rival en un Bernabéu de las noches de gala, como hizo en el segundo acto con el cuchillo entre los dientes, ni para disparar a su arco hasta el minuto 35, cuando ya perdía 0-2.