Unión no se rindió, lo buscó hasta el final, y consiguió lo que perdió en el final ante Huracán. Esta vez, en el último segundo de partido, anotó el gol con el cual venció a Gimnasia por 3-2 en La Plata, para meterse nuevamente en puestos de clasificación para la Sudamericana 2025.

En zona de vestuarios, uno de los que tomó la palabra fue el capitán Claudio Corvalán, quien dijo que "en la chaerla previa dije que íbamos a resurgir, estábamos convencidos en buscar los tres puntos y terminar el partido mirándonos a la cara, porque dejamos todo".

"Hay que resaltarlo y reconocer el trabajo que hicieron los chicos que entraron. Tienen que ir para delante y tendrán sus altibajos, pero no se tienen que caer, porque esto sigue. Tenemos que enfocarnos en lo que viene", agregó el capitán rojiblanco.

Y más adelante, analizó: "Hubo un quiebre en el gol que erró Nico Orsini, sentimos eso y nos quedamos un poco, porque hicimos un gran desgaste. Cuando ellos salieron por ser locales, nos costó encontrarle el ritmo. Se encuentran con ese penal dudoso. A partir de ahí fuimos para adelante, porque alguna vez teníamos que reaccionar y llegamos al segundo y el triunfo en el final, lo importante es que apareció el equipo y hay que volver a creer".

"El mensaje es el mismo para la gente, que iremos hasta el final. La gente siempre va a estar y solo dijo que creean en nosotros. Si lo hacemos con el compromiso del club al que defendemos, las cosas se darán. Después de tres derrotas en fila la crítica es mayor, pero más allá de eso, el equipo lo ganó con el corazón y se lo dedicamos al técnico, que viene de malos momentos", destacó Mugre.

Y en el final, destacó que "somos un plantel muy unido y con sentimos encontrados. Eso nos hace fuertes. Pasar por situaciones complicadas y sacarnos esa mochila de encuentros que no merecíamos perder. Nos hicimos cargo y se lo dedicamos a Kily"

También se refirió a los fallos en contra de los árbitros y dijo que "si se cobran todos los que nos sancionan a nosotros en el resto de los partidos, bien. Mi mano (ante Huracán) era imposible que sea intencional, ahora nos pasó de nuevo y en algún momento tiene que frenar. Espero que sean riguroso para todos los equipos. Duele porque siempre hay algo contra Unión".

Y en el final, cuando se lo consultó por su continuidad, indicó: "Quiero quedarme y no es tirarle la pelota a la dirigencia, se habló pero quedó en la nada. Es cuestión de que ellos pongan primera, pero hoy no lo pienso en eso, porque hay cosas más importantes que mi renovación".