¿Qué probabilidad existe de ser alcanzado por un rayo?
En las últimas horas se conoció el video de un jugador que fue impactado por un rayo y murió. Cuatro resultados heridos
Durante un partido de fútbol un rayo impactó en el campo de juego, causando la muerte de un futbolista y dejando varios heridos. Su nombre: José De la Cruz. Edad: 39 años. Este accidente, que podría parecer un evento excepcional, nos invita a reflexionar sobre los peligros de las tormentas eléctricas en actividades deportivas al aire libre, especialmente en zonas propensas a estos fenómenos.
Los impactos de rayos en deportistas no son tan infrecuentes como podría pensarse, de hecho hay ejemplos en el pasado. A nivel mundial, existen registros de eventos similares que subrayan la necesidad de establecer protocolos de seguridad específicos y sistemas de monitoreo que alerten ante riesgos potenciales. Para comprender mejor el fenómeno, este artículo expone los factores de riesgo, la probabilidad de ser alcanzado por un rayo en un evento deportivo y las recomendaciones científicas para minimizar el peligro.
El incidente en Huancayo
El incidente en Huancayo ocurrió durante un partido de fútbol local, donde el impacto del rayo fue inesperado y devastador. Inesperado a medias, pues en el minuto 22 se paró el juego ante el resto de tormenta eléctrica. Las tormentas eléctricas en la región andina de Perú no son poco comunes, y el cambio climático ha intensificado estos eventos meteorológicos extremos, según informes recientes de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Durante el evento, las condiciones meteorológicas cambiaron rápidamente, algo habitual en zonas de montaña donde el aire húmedo y cálido puede generar tormentas de forma súbita.
En Huancayo, un área ubicada a más de 3.200 metros sobre el nivel del mar, las tormentas eléctricas suelen ser intensas y peligrosas debido a la altitud. Los rayos tienden a concentrarse en puntos altos o áreas despejadas, como un campo de fútbol, haciendo que los jugadores y espectadores sean vulnerables en este tipo de escenarios. Este evento plantea una pregunta esencial: ¿qué tan probable es que una persona sea alcanzada por un rayo, y cómo puede evitarse en situaciones deportivas?
Un rayo mató a José Hugo de la Cruz Meza de 34 años, un futbolista del Juventud Bellavista que enfrentaba al Familia Chocca, partido aficionado en Huancayo, Perú. Otras 4 personas resultaron heridas. El partido se había parado.
— Cesar Augusto Londoño (@cesaralo) November 4, 2024
La imágenes son de alta sensibilidad pic.twitter.com/ICsPrmeuRx
Probabilidad de ser alcanzado por un rayo en eventos deportivos
Las estadísticas sobre la probabilidad de que te caiga un rayo son dispares, arían según la fuente y la región. Estas diferencias pueden deberse a variaciones en los métodos de cálculo y a factores como la ubicación geográfica y las actividades al aire libre. Además, estas cifras son estimaciones y pueden variar según las circunstancias individuales. según datos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), la probabilidad de que una persona promedio sea alcanzada por un rayo en su vida es de aproximadamente 1 en 15.000. Sin embargo, en condiciones específicas, como practicar deportes al aire libre, esta probabilidad puede ser considerablemente mayor. Los jugadores de fútbol, golfistas y otros atletas al aire libre se exponen a riesgos adicionales debido a la presencia prolongada en áreas abiertas y planas.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Weather and Climate Extremes, las actividades deportivas representan un 8% de las muertes por rayos en Estados Unidos. Este porcentaje destaca la vulnerabilidad de quienes practican deportes en zonas abiertas durante tormentas eléctricas. Además, el riesgo aumenta en países y regiones donde la topografía o el clima favorecen las tormentas, como sucede en los Andes peruanos.
Factores de riesgo en la incidencia de rayos en deportes al aire libre
Existen múltiples factores que incrementan la probabilidad de ser alcanzado por un rayo en actividades deportivas:
Altitud
La altura incrementa las posibilidades de que se formen rayos, ya que las tormentas eléctricas son comunes en altitudes elevadas donde el aire se enfría y condensa rápidamente. En zonas montañosas como los Andes, la frecuencia de tormentas eléctricas es más alta que en otras regiones.
Campo abierto
Los campos de fútbol y otros espacios deportivos al aire libre actúan como zonas de riesgo elevado debido a la falta de protección. El cuerpo humano, aunque no es un conductor ideal, se convierte en un “punto de conexión” entre el rayo y el suelo, lo que aumenta la probabilidad de daño grave o fatal.
Clima y humedad
El clima en ciertas regiones es especialmente propenso a generar tormentas, y la presencia de humedad aumenta el potencial eléctrico en el aire. La combinación de humedad y temperatura es clave para la formación de tormentas.
Objetos metálicos
Los arcos de fútbol y otros objetos metálicos en los estadios pueden actuar como puntos de atracción para los rayos. Al estar cerca de estas estructuras, los jugadores quedan expuestos a posibles descargas.
Medidas preventivas y protocolos de seguridad
Ante estos riesgos, existen diversas recomendaciones de seguridad para minimizar el peligro en eventos deportivos al aire libre. La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) recomienda suspender partidos cuando se detecten tormentas eléctricas en las cercanías, y otras federaciones han implementado pautas similares para diferentes deportes. Sin embargo, estos protocolos no siempre se aplican de manera rigurosa, especialmente en ligas y partidos locales sin acceso a tecnología avanzada.
Una solución tecnológica es la instalación de sistemas de detección de rayos, los cuales monitorean la formación de tormentas en un radio específico y emiten alertas para evitar que las personas permanezcan en áreas de riesgo. Estos dispositivos, aunque requieren una inversión inicial considerable, pueden salvar vidas y prevenir tragedias como la de Huancayo.
¿Cómo se forma un rayo?
Desde el punto de vista científico, los rayos son una manifestación de la acumulación de cargas eléctricas en las nubes. Cuando estas cargas alcanzan un umbral específico, se genera una descarga que puede dirigirse hacia la tierra. La ciencia detrás de los rayos muestra que ciertos factores aumentan la probabilidad de estos eventos, como la temperatura, la humedad y la presencia de partículas de polvo o polen que actúan como núcleos de condensación.
En áreas de alta altitud, como Huancayo, las nubes de tormenta se forman más cerca del suelo, lo que incrementa las probabilidades de que una descarga se dirija hacia la superficie. Además, las diferencias en las condiciones climáticas de la región andina pueden hacer que estas tormentas sean más potentes y menos predecibles que en otras latitudes.