Qué es "cara de cortisol", la manifestación física que se hizo viral

Los videos con ese hashtag acumulan millones de visualizaciones y todos culpan a la llamada “hormona del estrés”.

En los últimos meses, una tendencia viral sobre la “cara de cortisol”, que asocia el estrés con cambios notables en el rostro, se viralizó en Tik Tok.

Bajo hashtags como “cara de cortisol”, “cara de luna” o “cara de cortisol antes y después”, millones de usuarios comparten videos que muestran transformaciones faciales, alegando que la hinchazón y redondez del rostro pueden revertirse con prácticas como el yoga facial, la hidratación o los masajes con piedras de jade.

@psic.mariaqm Te identificas con alguno? 🫨 #cortisollevels #cortisolelevado #cortisolimbalance #bienestarintegral #autocuidadoconsciente #saludmentalyemocional ♬ Love story llsagittariusxxqueell - 🩰

Qué es el cortisol

El cortisol, una hormona que se activa ante situaciones de tensión, puede influir en diversas funciones corporales cuando se libera en exceso, especialmente en quienes experimentan estrés crónico.

Este fenómeno ha captado la atención de millones de personas en redes sociales, con comparaciones de antes y después que muestran los efectos visibles de esta hormona en el rostro.

El cortisol es una hormona producida en las glándulas suprarrenales, ubicadas justo encima de los riñones, y su función principal es ayudar al cuerpo a reaccionar ante situaciones de riesgo o peligro. Ante el estrés, el cerebro envía señales para que el cuerpo se prepare, aumentando el ritmo cardíaco, la presión arterial y liberando cortisol.

Cuando el nivel de estrés baja, la hormona disminuye y el cuerpo vuelve a su estado normal. Sin embargo, en situaciones de estrés crónico, el cortisol se mantiene elevado, lo que puede afectar diferentes sistemas en el organismo, como el cardiovascular, respiratorio, digestivo y hasta la función cognitiva.

Estrés acumulado

Entre sus manifestaciones físicas más visibles está la "cara de cortisol", un rostro con hinchazón, enrojecimiento y una tendencia a desarrollar acné debido a la sobreproducción de sebo y la inflamación de la piel.

Este efecto es similar a una hinchazón que se asemeja a una muñeca o a un rostro inflado, algo que quienes sufren de estrés crónico han comenzado a documentar en redes. La "cara de cortisol" ha ganado atención en plataformas como TikTok, donde los usuarios muestran cómo sus rostros cambian drásticamente cuando logran reducir el estrés y equilibrar sus niveles hormonales.

¿Existen los niveles adecuados de cortisol?

Sus niveles varían a lo largo del día. “Siguen un ritmo circadiano similar al de vigilia y sueño: por la mañana son más altos, desde 5 hasta 25 microgramos por decilitro, y por la noche bajan. Para detectar los niveles hay que realizar un análisis de sangre matutino y complementarlo con estudios de orina durante 24 horas”, detalla Molina.

Tan perjudicial es tenerlo alto como bajo. “El cortisol alto puede hinchar el rostro, alterar el metabolismo y favorecer la acumulación de grasa facial. Además, a muchas personas el estrés les lleva a comer en exceso o a consumir alimentos poco nutritivos que también afectan a la acumulación de grasa. Los niveles insuficientes provocan fatiga extrema, debilidad muscular, pérdida de peso, bajo apetito, presión arterial baja y, en algunos casos, hiperpigmentación”, añade Galofré.

@theworkoutwitch #duet with @witnesswellness ♬ original sound - xxtristanxo

Claves para mantenerlo estable

“Para combatir acné, la hinchazón, la grasa facial o la sequedad relacionadas con el exceso de cortisol es importante cuidar la piel, seguir una dieta equilibrada, practicar técnicas de relajación como el yoga o la meditación, y visitar a un dermatólogo en cuanto aparezcan los primeros síntomas. Entre los alimentos reductores del estrés y sus efectos en el cuerpo recomiendo los ricos en triptófano, que aumentan la producción de serotonina; los carbohidratos complejos para estabilizar los niveles de azúcar en sangre y el magnesio, la vitamina C y los ácidos grasos omega 3 para reducir la inflamación”, describe Galofré.

La nutricionista Claudia Benavente apunta que “es importante evitar los azúcares, las grasas saturadas y los alimentos procesados porque contribuyen al desequilibrio hormonal. Podemos reducir los efectos del estrés con ejercicio regular, un sueño adecuado y una buena hidratación. El ejercicio físico ayuda a reducir los niveles de cortisol, promueve la liberación de endorfinas y mejora el estado de ánimo. Además, contribuye a mantener una piel más sana y a reducir la inflamación”.