La Patagonia argentina guarda rincones mágicos, y en la provincia de Neuquén es posible descubrir playas escondidas entre montañas y rodeadas de una exuberante vegetación. Este verano, explorar los destinos únicos de la Patagonia que combinan tranquilidad, belleza natural y actividades es posible e imperdible para disfrutar en familia.

Neuquén es un destino popular para realizar actividades al aire libre como el senderismo y pesca, como así también nadar en sus lagos en verano. Por eso, quienes buscan relajarse junto a la naturaleza los próximos meses, tienen lugares increíbles para lograr el objetivo.

En este contexto también podrán participar de una variedad de actividades recreativas y turísticas que ofrece la región en sus tradicionales lugares como el Lago Lácar, la ciudad de San Martín de los Andes, y el Parque Nacional Lanín, y también descubrir estas tres playas: Playa Villa Tacul, Playa Lago Gutiérrez y la playa en Colonia Suiza.

El encanto de cada playa y su entorno la hace única

Ubicada dentro del Circuito Chico en Bariloche, Playa Villa Tacul es un verdadero paraíso rodeado de bosques frondosos y aguas cristalinas del Lago Nahuel Huapi. Este lugar es ideal para pasar el día relajándose en la playa o explorando senderos que llevan a miradores con vistas inolvidables. Para los más aventureros, el avistaje de aves y las caminatas por el bosque son actividades imperdibles. Llevar una vianda para disfrutar un picnic en la orilla del lago es una excelente idea para aprovechar en familia.

Luego, a pocos kilómetros del centro de Bariloche, el Lago Gutiérrez ofrece una playa de arena suave perfecta para un día en familia. Sus aguas tranquilas son ideales para que los niños se diviertan jugando o explorando las costas. Además, este lago es famoso por ser un punto perfecto para practicar kayak, stand-up paddle o simplemente nadar en sus frescas aguas. En los alrededores, el Refugio Frey es una opción popular para quienes disfrutan del trekking y desean combinar la visita con una experiencia de montaña.

Por último, en el corazón del Circuito Chico, Colonia Suiza se destaca no solo por su playa escondida, sino también por su atmósfera pintoresca, que recuerda a los pueblos alpinos europeos. Después de disfrutar del agua y el sol, es casi obligatorio recorrer el mercado artesanal y probar delicias locales como la trucha ahumada o el clásico curanto, un plato tradicional cocinado en un pozo bajo tierra. Los fines de semana, el pueblo cobra vida con ferias gastronómicas y actividades culturales que son ideales para toda la familia.

Recomendaciones para disfrutar al máximo de las playas de aguas cristalinas del sur

En estos destinos, la clave es llevar lo esencial como el protector solar, sombrillas y ropa cómoda. Además, las zonas están rodeadas de senderos donde se pueden realizar caminatas sencillas y seguras para todas las edades. Si bien las playas son tranquilas, se recomienda llegar temprano para encontrar el mejor lugar y aprovechar el día desde temprano.

Sabores de la Patagonia: una experiencia culinaria inolvidable

La gastronomía patagónica es otro gran atractivo de la región. En los alrededores de estas playas, se encuentran restaurantes y casas de té que ofrecen desde pastelería artesanal hasta platos tradicionales como cordero patagónico, acompañado de los mejores vinos de la región. Los amantes del chocolate no pueden perderse las chocolaterías de Bariloche, un verdadero emblema local.

Cómo llegar desde Buenos Aires a Bariloche

Para llegar a estas playas, el punto de partida es la ciudad de San Carlos de Bariloche. Desde Buenos Aires, los turistas pueden tomar un vuelo directo de aproximadamente dos horas hasta el Aeropuerto Internacional de la ciudad sureña y, desde allí, alquiler de un auto es la mejor opción para recorrer el Circuito Chico y llegar a estas playas escondidas, ya que permite disfrutar de los paisajes y la libertad de explorar cada rincón de la región.

La Patagonia Argentina es un destino perfecto para veranear gracias a su combinación única de paisajes imponentes, clima agradable y una amplia oferta de actividades al aire libre. Durante el verano, esta región despliega su máximo esplendor con días largos y soleados que invitan a disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.