El Quillá gritó bicampeón y extendió su hegemonía en el Oficial
Las Tiburonas lograron su estrella 12 en Primera División, tras vencer con autoridad en la final a CRAI por 3-0.
El Quillá celebra con otro trabajo impecable realizado. Las “tiburonas” bordearon a su escudo su duodécima estrella en Primera División. En un marco espectacular en la ASH (incluyendo la implementación del videref), las “tiburonas” se consagraron de manera indiscutida. Lo hicieron sin dejar dudas y en un nivel superlativo al imponerse 3-0 sobre CRAI.
Un equipo que fue superior, mostrando un mejor manejo de la bocha y contundencia a la hora de atacar. Se caracterizó por el buen juego, ofensivo y punzante. De esa manera retuvo el título en un encuentro que lo dominó con solvencia.
Juan Francisco David cumplió un factor decisivo. El orientador táctico construyó al campeón en el que conformó y “pulió” un plantel donde consolidó esquemas inexpugnables. Demostró su capacidad de darle un salto de calidad y jerarquía de categoría, que arrasó con jugadoras de estirpe ganadora.
La Final
El Quillá ejecutó un plan sin fisuras, insaciable y voraz para presionar sobre la salida rival. Desde el arranque, demostró la voluntad de ser protagonista e impuso un ritmo vertiginoso por los costados para intentar doblegar al rival.
Avanzó por la banda izquierda de la defensa rival y produjo dos remates, uno de Paulina Ponzo y otro de Julia Ponzo en el que “Maggie” Chemes respondió con gran reacción para evitar la caída de su arco.
La línea del Parque Belgrano exhibió su efectividad desde la jugada fija. Máxima Duportal abrió el camino al bicampeonato con un tiro potente al primer palo para la apertura del marcador. Pese a la diferencia, jamás dejó de lado el ritmo y la presión en el juego que demostró previamente.
Poco tiempo transcurrió para que castigara de nuevo sobre la base de una eficacia altísima. Fue en el segundo cuarto, con una buena combinación a la salida de un nuevo corner corto entre Máxima Duportal y Julia Ponzo, que la menor de las hermanas Ponzo definió cruzado de revés.
La ventaja le permitió manejar la bocha con tranquilidad ante un CRAI que no encontró el juego colectivo, de pases, los medios para generar peligro. Con más actitud que juego, Victoria Bertone recuperó sobre mitad de cancha, asistió a Victoria Etcheverry por el lateral, que avanzó para enviar un centro que nadie llegó a empujar.
Ya en el tercer período, Etcheverry cortó una salida de El Quillá y arremetió sola de frente del arco, pero la defensa “tiburona” se recuperó a tiempo para evitar que la atacante defina.
El ritmo lo estableció siempre El Quillá que con el control de las acciones, volvió a ser letal y aprovechó otra oportunidad desde la jugada fija. El quinto corner corto que tuvo lo concretó Martina Borgo con un desvío por el segundo palo tras una arrastrada de Julia Ponzo.
CRAI mejoró en su trabajo en ataque sobre el último parcial y logró algunas situaciones en busca del descuento. Primero con Ignacia Pelletan que achicó Milagros Aguirre. Después con un desborde de Bertone que superó en velocidad a Duportal y volvió a exigir a la “cancerbera” de El Quillá.
En el segundo corner corto que dispusieron las “gitanas”, Flor Villar remató con un disparo rasante que Aguirre se agigantó bajo su primer palo y mantuvo el cero en su valla. Así transcurrieron los minutos finales y se desató toda la locura “tiburona” desbordando de emoción y festejos en la cancha principal de la ASH.