Narcos fusilaron a siete personas el día en que México recibió al Papa
Un grupo comando atacó ayer una estación de servicio del estado de Sinaloa, dominado por la violencia de los cárteles. Benedicto XVII indicó al respecto: "La Iglesia católica tiene que desenmascarar la idolatría del dinero que esclaviza al hombre"
Siete personas fueron fusiladas a sangre fría por un comando armado en el estado noroccidental mexicano de Sinaloa, informaron fuentes policiales. Asimismo, en el balneario de Acapulco fueron halladas cuatro cabezas abandonadas.
El primer hecho se registró en un local de compraventa de combustible situado en la autopista Benito Juárez, en el municipio de Angostura, dijo una fuente de la Policía municipal que prefirió mantener en reserva su identidad.
La fuente, citando un testigo, dijo que los atacantes, que portaban fusiles AK-47 y AR-15, se presentaron en el comercio con dos hombres que traían maniatados y sometieron allí a cuatro empleados y al conductor de un camión.
"Ordenaron a los trabajadores del lugar, al trailero y a los dos tipos que traían amarrados que se tiraran boca abajo sobre la carretera, para después fusilarlos y dejar a los siete sin vida", dijo la fuente policial.
Las autoridades identificaron ya a cinco de las víctimas, con edades comprendidas entre los 24 y los 59 años.
El lugar fue acordonado por agentes fiscales y militares, quienes desplegaron un fuerte operativo con el objetivo de encontrar a los asesinos.
Ayer por la mañana, en la misma carretera fueron asesinadas otras dos personas.
No se confirmó quiénes son los autores de estos crímenes, pero las sospechas apuntan a grupos vinculados con los cárteles del narcotráfico.
Sinaloa es uno de los estados de México que mayor violencia sufre por rivalidades entre organizaciones del crimen organizado.
Las palabras del Sumo Pontífice
Ayer, a horas de arribar a México, el papa Benedicto XVI arremetió contra el crimen organizado.
El religioso hizo estas manifestaciones camino a León, en el estado mexicano de Guanajuato, primera etapa de su visita a México y Cuba, en su primer viaje a dos países latinoamericanos de lengua española.
En su tradicional encuentro en el avión con los periodistas que lo acompañan, Ratzinger exhortó a los mexicanos a fortalecer la convivencia pacífica y a luchar, con la contribución de la Iglesia, contra el narcotráfico.
Benedicto XVI se refirió a la violencia debida al narcotráfico que sufre México, que se cobró en los últimos cinco años unas 50.000 vidas, y dijo que la Iglesia católica tiene una gran responsabilidad para educar las conciencias.
"Hay que hacer todo lo posible contra este mal destructor de la humanidad y de nuestra juventud. La primera cosa es anunciar a Dios, el juez que nos ama y nos empuja al bien y a la verdad y a luchar contra el mal", refirió.
Y finalizó: "La Iglesia tiene que educar las conciencias, educar en la responsabilidad moral y desenmascarar el mal. También tiene que desenmascarar la idolatría del dinero que esclaviza al hombre y desenmascarar las falsedades, las mentiras y el engaño".