Toda la gloria es para SFRC que vuelve a ser campeón en esta divisional. En la final, no fueron las mejores porque la UNL fue superior. Pero el “santa” tiene esa grandeza para apretar los dientes cuando el viento sopla en contra. Logró llevar la definición a los penales para imponerse en esa instancia y celebrar el hexacampeonato.

El partido estuvo en manos de la “U”. Las dirigidas por Agustina Blazicevic salieron a jugar el partido con decisión, con autoridad, sabiendo lo que estaba en juego. Con presión alta, buenas triangulaciones y su gran intensidad, dominó en todas las líneas y generó las mejores jugadas.

SFRC priorizó el orden, se mostró bien parado en su trabajo defensivo y achicó espacios. Propuso cuidando la bocha y en esa faceta, Liliana Cipriani y Alejandra Malaspina, estuvieron muy firmes en la conducción para intentar avanzar y controlar el ritmo.

Sin embargo, sobre el cierre del segundo cuarto, la UNL produjo una jugada clave que reflejó la buena conexión y fluidez del equipo. Hubo una gran recuperación sobre la salida de SFRC por parte de Sabrina Ferreyra y la delantera arremetió hacia al área desbordando para enviar el centro.

Daniela Brauer se anticipó a su marca y los centrales. Conectó de primera sobre el medio del área con un disparo potente y cruzado para el primer grito de la tarde. Tras el entretiempo largo, la “U” ya no tuvo la misma consistencia y el equipo de Gustavo Moreno levantó cabeza para ir en busca de la igualdad.

Empujó y aprovechó una de las situaciones que tuvo en todo el encuentro. Fue Andrea Antonione la que sacó rédito de una distracción de la defensa para adelantarse en el área y ejecutó un «misil» al primer palo en el 1-1.

La UNL recuperó su ímpetu y atacó. Dispuso de varias oportunidades, especialmente desde la jugada fija. Sin embargo, Guille Veloso se vistió de héroe bajo el arco “santa” y sostuvo la igualdad. La “U” lo siguió intentando de todas las maneras, pero no logró volver a encontrar la red.

El partido finalizó en empate, yendo a la definición de penales tradicionales. En esa instancia, el “santa” sacó pecho y estuvo más certero para imponerse 5-3. Convirtieron Alejandra Malaspina, Guadalupe Bassino, Cecilia Alberto, Liliana Cipriani y Andrea Antonione.

En la UNL, lo hicieron Giovana Tardivo, Delfina Zaburlin y Lara Argüello. Fue un año intenso para la “U”. Demostró su competitividad y tuvo un gran nivel de juego al ser uno de los equipos que marcó el pulso en gran parte de la temporada. Conformó un grupo muy unido que luchó hasta el final. Más allá de la derrota, confirmó que está para grandes cosas.

La alegría y emoción desbordó al “santa” al grito de HEXACAMPEÓN. Una campaña redonda que complementó a través una temporada invicta. Expusieron que se puede ser efectivo y vistoso, más allá de sus cualidades individuales. Su plantel volvió a evidenciar su gran capacidad teniendo un poco de todo, de talento para resolver y de clase para defender.