La espera terminó y la Fórmula 1 pone primera en Australia. El circuito de Melbourne será testigo del inicio de la temporada 2025 y, aunque Franco Colapinto todavía no tiene su butaca asegurada, Alpine sigue dándole señales que ilusionan a los argentinos.

En las últimas horas, la cuenta oficial de la escudería francesa publicó un video con el piloto pilarense como protagonista. Sentado en el simulador, Colapinto recorre virtualmente el trazado del GP de Australia y explica las claves del circuito. "Hola chicos, soy Franco. Voy a hacer la guía del circuito para Australia. Es la primera carrera del año y la de casa de Jack", comentó en la introducción, en alusión a su compañero de equipo, Jack Doohan.

Heading down under for the opening round of the season! 🇦🇺🦘

Presented by @eni , join Franco for a lap around Jack’s home race — the Albert Park Grand Prix Circuit 😎@trak_racer @cybertek_fr pic.twitter.com/XCHDxGS2H9

— BWT Alpine Formula One Team (@AlpineF1Team) March 12, 2025

El gesto de Alpine no pasó desapercibido. En Argentina, la ilusión por ver a Colapinto en la F1 sigue en alza, pero en Australia lo ven como una amenaza. De hecho, medios locales ya advierten que el argentino podría quitarle el asiento a Doohan si el australiano no arranca con el pie derecho.

Jack Doohan es el segundo piloto de Alpine y debutará oficialmente como titular en este campeonato. Sin embargo, el contexto no es el ideal. En el GP de Australia, su propia casa, correrá con la presión extra de saber que tiene a Colapinto esperando su oportunidad.

El Sydney Morning Herald analizó la situación y alertó sobre el peligro que representa el argentino para Doohan. “Imagínese avanzar lentamente hacia el trabajo de sus sueños y finalmente obtener el visto bueno, solo para que su empleador contrate inmediatamente a alguien igual de calificado y significativamente más atractivo financieramente, preparándote para el fracaso”, escribió el periodista Matthew Clayton, dejando en claro que la presencia de Colapinto no es casualidad.

Además, el medio australiano destacó que, más allá de su talento, Franco es un imán comercial: “La popularidad de Colapinto en un país hambriento de pilotos de Fórmula 1 (y sin un Gran Premio desde 1998) generó un interés comercial significativo. El año pasado, personas con información privilegiada del paddock sugirieron que los patrocinadores comerciales de Colapinto estaban aportando 500.000 dólares por carrera durante su breve paso por Williams”.