Londres, dispuesto a identificar los restos de soldados en Darwin

Más de la mitad de las tumbas en el cementerio de Malvinas no tiene nombre. En el Reino Unido aceptarían la propuesta más allá de las “diferencias políticas. El trabajo estaría a cargo de la Cruz Roja.

Londres aceptaría identificar los restos de los soldados sin nombre sepultados en el cementerio de Darwin, tal como solicitó la Presidente Cristina Kirchner el pasado 2 de abril, mediante una carta a la Cruz Roja Internacional.

“Claramente este es un tema sensible para ambos países y, cuales sean nuestras diferencias políticas, reconocemos la angustia de las familias que perdieron a sus seres amados en el conflicto, especialmente a aquellas cuyos restos nunca han sido identificados”, aseguraron fuentes de la Cancillería inglesa consultadas por El Cronista.
Las gestiones se están haciendo al más alto nivel con la intermediación del Comité Internacional de la Cruz Roja y la idea es que un grupo de expertos forenses argentinos, británicos y del organismo internacional viajen a Malvinas para comenzar la ardua y sensible tarea de desenterrar los restos de aquellos que combatieron hace 30 años en las islas.

“Hay una negociación muy compleja. Será una tarea difícil, porque es un trabajo de no menos de un año”, explican los diplomáticos argentinos.

En el cementerio de Darwin hay actualmente 234 tumbas de soldados argentinos, de las cuales 123 no tienen nombre y llevan una placa que dice: “Soldado argentino sólo conocido por Dios”. Son 123 familias que están hoy imposibilitados de dejar una flor sobre la lápida del ser querido que perdieron en Malvinas.

La Presidente reveló que había enviado una carta a la Cruz Roja Internacional en la que pidió que se tomen “las medidas pertinentes ante el Reino Unido, para poder identificar a los hombres argentinos y aún ingleses que no han podido ser identificados, porque todos merecen tener su nombre en una lápida”.

Horas más tarde, el vocero del organismo, Steven Anderson, aseguró desde la sede de Ginebra: “Por supuesto estamos dispuestos a prestar servicios como intermediario neutral en este asunto humanitario que es muy importante, siempre y cuando esta tarea sea solicitada por todas las partes y las familias”.

Precisamente esa es la tarea a la que están abocados en el Palacio San Martín por estos días. En Suiza, las gestiones están a cargo del embajador Alberto D’ Alotto.
Las negociaciones por el momento son extraoficiales, en un intento de aceitar la letra chica de un entendimiento, pero todo se está encauzando para un acuerdo sobre la identificación de los restos en las islas, confió a este diario uno de los negociadores por la Cancillería.

De hecho, el vocero de la Cruz Roja adelantó que en las próximas semanas será respondida formalmente la carta a la Presidente. En Londres, la Cancillería británica también destacó un tema ríspido para la Argentina y es que “el gobierno de las islas Falklands (Malvinas) también tendrá que involucrarse en las discusiones sobre el tema”.

Lo cierto es que deberán hacerlo a través de la administración de David Cameron, único negociador reconocido por el gobierno argentino. Pero además, en un tema tan sensible, será muy difícil que los kelpers se nieguen o pongan trabas para cerrar una herida que no es de guerra, sino netamente humanitaria. Sobre todo, porque todavía no está claro si, en el fragor de los últimos días de la guerra, fueron sepultados soldados británicos con los argentinos en Darwin.