Pullaro celebró el triunfo, pero advirtió por la baja participación

Maximiliano Pullaro celebró que Unidos para Cambiar Santa Fe ganara “más del 80 % de los distritos”, pero advirtió que la provincia registró “la elección con menor participación en 42 años de democracia”.

Recién pasadas las 19.30 del domingo, el gobernador Maximiliano Pullaro subió al escenario del búnker oficialista acompañado por la vicegobernadora Gisela Scaglia y un mapa de la “bota” santafesina completamente teñido de celeste. Con el 100 % de las mesas cerradas y 304 localidades computadas, Unidos para Cambiar Santa Fe se imponía en 247 distritos y aventajaba al peronismo (42) y a La Libertad Avanza (4). Además, el frente oficialista ganaba en 17 de las 19 ciudades que renovaban intendente.
 
“Quiero que vean este mapa de la bota de Santa Fe. Adivinen quién es el rojo. La bota quedó pintada de un solo color”, ironizó Pullaro, que interpretó el resultado como un respaldo a su administración: “Nos eligieron para gobernar la provincia, pero también para conducir la mayoría de los pueblos y ciudades”.
 
María Luengo fue la más votada en una jornada con baja asistencia

Sin embargo, el mandatario provincial hizo una pausa para alertar sobre la escasa concurrencia a las urnas. “Es la elección con menor participación en 42 años de democracia y eso debe ser motivo de reflexión”, sostuvo. Pullaro vinculó parte del ausentismo al hecho de que en 146 localidades no hubo competencia, porque las listas se presentaron únicas, pero admitió que la apatía excede esa explicación: “Esto nos tiene que interpelar a todos los partidos”.

El dato preocupa: en numerosos departamentos la asistencia quedó por debajo del 50 % y en los dos centros urbanos más grandes –La Capital y Rosario– la abstención empujó a la baja el promedio general. “Si las urnas hablan por falta de votos, hay un mensaje que escuchar”, deslizaron luego en la mesa chica del gobernador.
 
Pullaro cerró su discurso con un agradecimiento y un compromiso: “Quiero agradecer de corazón a todos los santafesinos y santafesinas. Fue un camino difícil, con momentos muy duros, pero este triunfo es el espaldarazo que necesitábamos para seguir adelante”. Mientras el equipo celebraba, la postal de la bota celeste quedaba opacada por la sombra de una participación que obliga a repensar cómo convocar a un electorado cada vez más distante.