Llegada la instancia de preguntas y luego de casi tres horas de alocución por parte de los nuevos interventores de YPF, Julio De Vido (ministro de Planificación) y Axel Kicillof (viceministro de Economía), se desataron fuertes cruces entre los representantes del Ejecutivo y los senadores radicales.

Luis Naidenoff (UCR) le achacó a De Vido que su disertación fue "desmemoriada" ya que "olvidó" que la privatización de 1992 fue apoyada por Néstor y Cristina Kirchner y recordó que, por entonces, hubo un proyecto de delcaración de la legislatura santacruceña que instaba al Congreso a aprobar aquella ley.

Kicillof le respondió en duros términos y ocasionó un ida y vuelta que fue subiendo de tono hasta que el viceministro apartó a un lado el micrófono pidiendo terminar con las "chicanas".

"Pide el jefe de bloque que bajemos un cambio", los interrumpió uno de los presentes en medio del desorden y los gritos.

Le tocó entonces tomar la palabra al senador de la UCR Gerardo Morales, quien había protagonizado una situación similar durante el debate por el traspaso de los subtes. "Trate de poner en orden, no sólo a nosotros, sino también a los representantes del Ejecutivo", fue lo primero que le requirió a Miguel Ángel Pichetto, titular del bloque kirchnerista.

"El Gobierno nacional, antes de la expropiación, debería haber controlado los vericuetos a los que aludió Kicillof", protestó Morales y aseguró que hubo "connivencia" con Repsol. "Nos llama la atención por qué Kicillof no mencionó la responsabilidad de la familia Eskenazi ¿Por qué se expropia solamente a la parte española?".

"De esta historia nos tenemos que hacer cargo todos y hoy la Presidenta nos da la oportunidad de salir de esta situación de YPF", enfatizó De Vido..