Dicen que Buenos Aires es la ciudad más neurótica del mundo, la que ostenta uno de los mayores porcentajes de psicólogos. Pues bien, desde el próximo lunes, la ficción no será ajena a esa realidad y dará rienda suelta a diferentes sesiones de terapia.

Un matrimonio en crisis, una médica con problemas de pareja que terminará enamorándose de su terapeuta, un policía de elite devenido asesino por error y una adolescente con tendencias suicidas serán los pacientes del prestigioso psicólogo Guillermo Montes, a quien dará vida Diego Peretti en En terapia . Se trata de la versión local de la serie israelí Be Tipul (en la que se basa la exitosa producción estadounidense In Treatment ), adaptada por Esther Feldman y Alejandro Maci, que se anuncia como la gran apuesta de Canal 7 en materia de ficción.

Estructuradas a partir de la agenda del psicoanalista, las citas, que serán de lunes a viernes, a las 22.30, por la Televisión Pública, mostrarán las miserias, deseos, miedos y angustias de los personajes de Julieta Cardinali, Leonardo Sbaraglia, Dolores Fonzi, Norma Aleandro, Germán Palacios y Ailín Salas.

"Cada uno de los pacientes tiene una riqueza psicológica enorme. Está tan bien escrita la problemática interna de cada uno de ellos, que hablo de pacientes y no de personajes", sostiene Peretti, psiquiatra de profesión, que se mete en el rol de psicoanalista por tercera vez en su carrera actoral ( Locas de amor , Tiempo de valientes ).

Sbaraglia coincide: "[La tira] tiene la lógica de terapia real. Como actor, uno se entrega a la cámara encendida durante 40 minutos y se empieza a abrir al mismo tiempo que lo hace el personaje. Como los procesos internos no están precipitados ni buscados especulativamente, empieza a aparecer algo de una verdad absoluta, del aquí y ahora. Es un viaje emocional, es lo más parecido a la vida real que he hecho como artista."

El famoso rating, ese enemigo de artistas y productores que muchas veces cataloga como fracaso a un proyecto artísticamente valioso, parece no amenazar a los productos del canal estatal. "Esta tira no se va medir en término de números. En la Televisión Pública, hay mucha menos presión. No se cambia nada por el rating", asegura Cardinali.

Sbaraglia opina en la misma dirección: "No estamos dentro de un mercado en el que hay que salir a vender, a competir. Se está pendiente de darle a la audiencia lo mejor posible. Sería bueno que se lo subestime menos al televidente. Al espectador culto se lo construye."

En terapia compartirá la misma franja horaria que el polémico-aunque exitoso- certamen de Marcelo Tinelli, Bailando 2012 , pero eso no asusta al elenco.

"No hay competencia posible con Tinelli. Quienes ven Bailando no va a ver esta ficción y viceversa. La gente dice que ve a Marcelo después de pensar todo el día en sus problemas, porque no quiere preocuparse más. El nuestro es un programa que le propone encontrarse con su humanidad y hallar en la tele un espacio de reflexión para pensar en sus propios asuntos", señala Fonzi.