Envuelto en una polémica con su ex mujer, que lo acusó de violento, y en el centro de las sospechas por el supuesto ofrecimiento de sobornos en la Legislatura bonaerense cuando se votó el revalúo rural, el diputado kirchnerista José Ottavis mantuvo ayer el perfil bajo.

Sólo se limitó a decir: "No voy a hablar nunca de la madre de mi hijo. Me limito a cumplir con lo que la Justicia de Familia ordena".

Así lo citó hoy el diario Página 12, que en diálogo con el círculo de allegados de Ottavis desmintió las versiones que ayer difundió ante la prensa la ex esposa del referente de La Cámpora, Laura Elías.

Mientras Elías acusó al legislador de falsear su domicilio para poder ser candidato en la provincia, de incrementar su patrimonio considerablemente y de haberla golpeado, los amigos de Ottavis rechazaron todo.

Sus allegados contaron que creció en San Isidro, que "viene de una familia de muy buena posición económica" y que, actualmente, "alquila un departamento en la calle San Martín, en el centro porteño, por el que paga alrededor del quince por ciento de su sueldo de diputado".

Sobre el conflicto familiar, Ottavis evitó polemizar con Elías, con quien se divorció en 2006, mientras sus íntimos relataron que el vicepresidente de la Cámara de Diputados bonaerense mantiene la tenencia de su hijo porque así lo dispuso la Justicia de Familia.