YPF lideró la caída de las petroleras y lo sintió el Merval
El Merval finalizó con una caída de 0,47%, hasta situarse en las 2199,97 unidades, arrastrado por firmas vinculadas a los sectores financiero y petrolero.
Los ajustes más importantes los experimentaron: YPF (5,39%), Petrobras Argentina (3,18%), Tenaris (1,30%), Galicia (1,03%) y Francés (0,66%).
El total negociado en acciones ascendió apenas a $ 29.140.645, con un balance de 33 papeles en baja, 20 en alza y 8 sin registrar cambios en su cotización.
“La expectativa por los acontecimientos desde la eurozona, a la espera de claves definiciones tanto del debate del G-7 como del BCE en pocos días, condicionó a los activos financieros locales que en consecuencia volvieron a responder de manera dispar”, explicó en un informe Gustavo Ber, titular de Estudio Ber.
“Fue así que el Merval al final cayó 0,5%, ante la presión vendedora principalmente de las petroleras (-3%), aunque bajo un volumen que no levanta”, añadió.
¿Qué pasó con los bonos?
“En cambio, mejor reaccionaron los bonos con subas promedio de 1,2% entre las principales referencias, incluso con los de dólares medios (+2,5%) volviéndose a sumar”, detalló en su informe Ber.
Entre los bonos, el Descuento en pesos subió 1,21%, el NF18 ascendió 0,66%, el Par en pesos creció 1,39%, el PR13 mejoró 1,50%, el Boden 2012 retrocedió 1,31% y el Boden 2015 saltó 1,61%.
“De igual manera, los cupones atados al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) mostraron un mayor dinamismo y avanzaron en promedio un 2%”, añadió.
El TVPA (en dólares) trepó 3,51%, el TVPP (en pesos) avanzó 1,27% y el TVPY (regido por la ley extranjera) se apreció 3,04%.
¿Qué pasará mañana?
“Siguen las ruedas con tono de cautela, mientras los inversores esperan un ‘salvavidas’ por parte del BCE para intentar estabilizar la situación y también en menos de dos semanas las elecciones griegas, en busca de frenar el pánico que se estaría adueñando de la escena mundial, lo cual no es un buen consejero ya que suele derivar en ‘sobrereacciones’”, remarcó Ber.
Según el economista, “ocurre que la ebullición de la eurozona sigue en ascenso, ya no sólo por las elecciones helenas sino también por la delicada salud del sistema financiero español, y además continúan sumándose en los últimos días inoportunas señales negativas sobre la ‘macro’ global que no hacen más que intensificar la aversión al riesgo entre los inversores”.
“En este incierto y volátil clima externo, los activos domésticos -al igual que la mayoría de los emergentes- no tienen más remedio que verse contagiados del pesimismo global, lo cual sumado a condimentos domésticos sigue derivando en excesivos castigos en las valuaciones, que los inversores todavía no se muestran demasiado decididos a aprovechar”, completó.