Jorge Vasconcelos, economista de la Fundación Mediterránea, se mostró preocupado en Radio 10 por la situación económica.

En primer lugar, se refirió a la evolución de la desaceleración del nivel de actividad en este último tiempo. "En el segundo trimestre han empeorado todos los datos del primer trimestre", dijo el economista.

Explicó que la tendencia negativa se registró tempranamente en los indicadores de inversión, como los despachos de cemento (asociados al sector de la construcción) y de importaciones de bienes de capital.

Sin embargo, este problema que en un principio “se notaba con más fuerza en inversiones" y que habría sido relativamente marginal respecto del desenvolvimiento económico nacional, se amplificó en los últimos tiempos. "Últimamente se advierte una generalización de ese enfriamiento incluso a nivel de consumo básico como durable", dijo Vasconcelos.

El enfriamiento “se percibe en la evolución de la recaudación del IVA, que refleja de forma muy nítida lo que pasa con la facturación dentro de la economía”, explicó el investigador de la Fundación Mediterránea.



Diferencias con la recesión del 2009

En su análisis, el especialista comparó la coyuntura actual con el retroceso de la economía acaecido durante la recesión global del 2008/9.

En lo que respecta a los problemas internos, el economista aseguró que “la situación fiscal es más delicada, los estados provinciales están interrumpiendo obra pública y el mercado inmobiliario está mucho más trabado por los controles de cambio”.

“El despacho de cemento está cayendo un 14/15%, para los meses de abril y mayo. (La caída) es superior a la que se encontró en 2009, que fue un año recesivo. En aquel momento el sector público estaba en mejores condiciones. Evidentemente la obra pública está siendo más afectada que en ese año”, argumentó Vasconcelos.

Por lo tanto, asegura que uno de los sectores más afectados son el inmobiliario y el de la construcción. “La inversión privada en construcciones parece esta desacelerándose fuerte por los controles cambiarios”, dijo el economista.

De esta forma, para el profesional “los controles de cambio están afectando factores restrictivos al funcionamiento de la economía”.

Con respecto a la situación global, Vasconcelos afirmó que “el mundo se ha desacelerado y eso pega negativamente, sobre todo sobre Brasil que está más globalizado”.

"Si uno mira las importaciones mundiales, todavía la diferencia es significativa” diagnosticó el economista, en referencia al flujo comercial entre los países era mayor en aquella coyuntura."

Por lo tanto, Vasconcelos advirtió que el nivel de actividad mundial “también nos afecta, pero no en la magnitud que nos afectó en 2008/9”.