El maquinista está declarando otra vez ante el juez

Marcos Córdoba manejaba el tren que se accidentó el 22 de febrero y contra él apuntaron ex funcionarios y directivos de TBA que ya pasaron por el juzgado de Bonadio. Ya había declarado y ahora amplía su indagatoria.

El maquinista Marcos Córdoba, que manejaba el tren del Sarmiento que el 22 de febrero se estrelló en la estación de Once en un accidente que dejó 51 muertos y más de 700 heridos, amplía esta mañana su declaración indagatoria ante el juez federal Claudio Bonadio.

Cordoba (28) llegó esta mañana a los tribunales acompañado de su abogada defensora, Valeria Corbaccio, que en otras causas defendió a efectivos de la Policía Federal, según informaron fuentes judiciales citadas por las agencias de noticias.

El maquinista, que resultó herido en el accidente y que está imputado en la causa, ya había declarado previamente. Ese día dijo que no funcionaron los frenos del tren.

Desde el comienzo de la causa, varios funcionarios y directivos de TBA le apuntaron a Córdoba. El ex secretario de Transporte Juan Schiavi y el dueño de TBA, Claudio Cirigliano, entre otros, lo señalaran como el principal responsable de la tragedia.

Schiavi le dedicó varias de sus reflexiones en las 65 páginas de su escrito. Una de ellas dice: "Si se hubieran realizado mayores inversiones en infraestructura y seguridad ferroviaria ... ¿se habría evitado el accidente? Por más perfectible que se pueda hacer el sistema ferroviario, ¿qué impide que el mejor de los trenes se accidente si el maquinista desactiva el sistema de seguridad para imprevistos y luego no frena porque tuvo algún problema de salud? ¿Acaso no chocaría igual?".

Hace pocas semanas se filtró el resultado de un electroencefalograma realizado el 15 de marzo. Mónica Perassolo, la médica que lo firmó, explicó luego ante el juez que "el 3% de la población que no padece epilepsia tiene manifestaciones" similares a las detectadas en la actividad eléctrica del cerebro de Córdoba. Perassolo aseguró que ese informe no es indicativo de que Córdoba padezca epilepsia y que esa enfermedad se diagnostica con estudios más exhaustivos que los que se hicieron en el Cuerpo Médico Forense.

Córdoba había ingresado al mundo ferroviario bajo la tutela de su padrastro Carlos Blázquez, que se desempeña como maquinista de la línea Sarmiento. A los 24 años, ingresó como ayudante de conductor y dos años después se convirtió en motorman. Condujo 3.400 viajes y arrolló a 4 personas (en accidentes), según su foja.