Cristina define cómo sigue en el Congreso el proyecto de pesificación de contratos
Rossi dijo que la iniciativa de Depetri es absolutamente viable. El titular de la bancada del FPV en Diputados consideró que el Ejecutivo debe definir si impulsa una ley pesificadora. El Gabinete económico está dividido
La presidenta Cristina Fernández definirá en los próximos días si da luz verde al proyecto de ley oficialista para pesificar contratos, en medio del debate en el seno del Gobierno sobre hasta dónde avanzar con las restricciones a las operaciones con divisas extranjeras.
El diputado del Frente para la Victoria (FPV) Edgardo Depetri presentó el jueves pasado un proyecto para modificar el artículo 617 del Código Civil, cuyo texto –que data de la convertibilidad– obliga a quien contrae obligaciones en moneda extranjera a cancelarlas en esa especie. A su vez, se obligará a que los contratos para compra venta de bienes muebles e inmuebles y alquileres se realicen en pesos. La letra aclara que la norma, de ser votada, sólo alcanzaría a los contratos futuros y no a los que están en curso.
El presidente del bloque del FPV, Agustín Rossi, respaldó el proyecto de su compañero de bancada, pero fue cauto: “El proyecto que presentó Depetri va en el sentido de lo que nosotros venimos hablando de la necesidad de que la Argentina piense más en pesos y menos en moneda extranjera, pero hay que estudiarlo y consultarlo con el área económica del Poder Ejecutivo para ver cuáles son los efectos que va a generar”, sostuvo en declarciones al programa “Mañana es mejor” por FM Blue. “Es absolutamente viable y lo ponderamos positivamente”, agregó, pero remarcó que “la decisión no está tomada aún” y que la discusión “recién empieza”. El proyecto de Depetri recién ingresó al Congreso y si bien sus allegados deslizaron que hay apoyo dentro del bloque kirchnerista para tratarlo, todavía no hay luz verde desde la Casa Rosada.
Aquí es donde deberá terciar la Presidenta. Los cerebros económicos del Gobierno están divididos en la cuestión del dólar. Hace diez días, el viceministro de Economía, Axel Kicillof, rechazó con vehemencia la posibilidad de pesificar la economía. Otros funcionarios, como la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, son partidarios de avanzar con cautela en ese sentido, siempre que se deje en claro que no se tocarán los ahorros nominados en dólares que yacen en cuentas a la vista, plazos fijos y cajas de seguridad.
El tema es muy sensible. Según los últimos datos del Central, la salida de depósitos en dólares se aceleró la última semana de mayo, cuando los límites a la compra de divisas se profundizaron. Entre el 28 de mayo y el 1 del actual, los ahorristas sacaron del sistema financiero u$s 120 millones por día. La semana anterior se habían ido otros u$s 100 millones diarios.
Los depósitos en dólares del sector privado cayeron en mayo un 13,2%, hasta los u$s 10.425 millones. A fines de octubre, cuando se implementaron los primeros controles a la compra de divisas, había u$s 14.914 millones en el sistema financiero, o un 30% más que en la actualidad.
Ante esa histeria, la posición oficial no está clara. No son pocos los funcionarios partidarios de flexibilizar los estrictos controles de la AFIP a la compra de divisas. La semana pasada, el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, intentó negociar con las casas de cambio valores “aceptables” para el dólar paralelo, que cotiza un 30% más caro que el oficial. El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, respondió con más procedimientos contra el mercado ilegal de divisas. En el Gabinete existen partidarios de flexibilizar los controles después del pago del Boden 2012 (en agosto). Los más duros consideran que el cepo será permanente.