Para captar clientes jóvenes, los bancos atenderán por redes sociales
Los usuarios de Facebook y Twitter podrán operar con un oficial de cuentas para realizar préstamos, depósitos e inversiones. Varias entidades tienen interés en explotar este nicho de mercado. La “Generación Y” de entre 18 y 25 años, en la mira.
Aún no desarrollada en el país, este tipo de comercialización de productos financieros es una tendencia que comienza a imponerse en el mundo. En Argentina probablemente no sea excepción, ya que hay varias instituciones bancarias locales seducidas por la idea de expandir el negocio bajo esta modalidad.
Es que la atención al público mediante redes sociales significa importantes beneficios, tanto en lo económico como en lo comercial. Permite a los clientes no tener que concurrir a la sucursal, amplía los horarios de atención (superando el horario vigente de 10 a 15 horas), y posibilita a las entidades segmentar de manera más eficiente el mercado.
“Es la mejor forma de ir a buscar a los clientes donde están y escuchar los temas que les interesan. Uno suele escuchar con mayor atención a un amigo de Facebook que te recomienda algo antes que al típíco llamado de call center tratándote de venderte un producto”, comentó Luz Mihanovich en el diario El Cronista, gerente senior de Servicios Financieros de Accenture.
Bajo esta forma de venta, los bancos pretenden conquistar a los jóvenes de entre 18 y 25 años, grupo que más hace uso de las redes sociales. Como Facebook permite conocer mejor al cliente, debido a las publicaciones que realiza en su cuenta, la oferta de productos bancarios se puede segmentar mejor acorde al perfil. Al “targetearlo mejor”, se aumenta la rentabilidad por cliente.
“La gente expone mucho sobre su vida en Facebook, entonces se le puede sacar el perfil a la persona para orientarla mejor: por ejemplo, si anuncia que se va a ir de vacaciones poder ofrecerle un préstamo personal. Si muestra la foto de su auto nuevo, darle un seguro”, explicó Mihanovich.
Con respecto al Twitter, muchas instituciones bancarias lo utilizan como una suerte de call center, donde el personal especializado atiende los reclamos y pedidos de los clientes.
Ahora bien, la implementación de esta forma de comercialización dependerá de la normatividad legal de cada país. Por ejemplo, una “sucursal” de Facebook linkea al cliente a la web del banco, o en caso de no poder hacerlo, confeccionan todos los formularios necesarios para dejar todo preaprobado para que el cliente sólo tenga que concurrir a la filial comercial para firmar.