Schoklender fue indagado esta tarde por cuarta vez en la causa en la que está acusado de ser "jefe de una asociación ilícita", en la investigación sobre el desvío de fondos que recibía la Fundación en el marco del programa "Sueños Compartidos".

El ex apoderado de las Madres de Plaza de Mayo dijo que Oyarbide y el fiscal fueron "cómplices" del intendente de Quilmes, Francisco "Barba" Gutiérrez, y del contador Roberto Domínguez, al no haber tomado medidas para evitar que se licuen unos 140 millones de pesos.

Schoklender, que se encuentra en libertad gracias a un fallo de la Cámara Federal que le redujo la fianza, denunció a Oyarbide y Di Lello por "prevaricato", esto es, haber adoptado medidas contrarias a derecho, porque, según él, no habrían "tomado las medidas que solicité para evitar el vaciamiento" de la Fundación.

Schoklender pidió, con el patrocinio de la defensora oficial Perla Martínez de Buck, que se extraigan sus dichos, y que otro juez los investigue, según los voceros.

En relación al "Barba" Gutiérrez y el contador Domínguez, Schoklender los acusó de haber creado un fideicomiso al que habrían ido millonarios fondos de la Fundación.

Finalmente, volvió a acusar a la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y a su hija Alejandra –esta última acusada en la causa–, del "manejo irregular" de subsidios que recibía la entidad.

Según declaró, "se trata de subsidios entregados por el Ministerio de Desarrollo Social, Secretaría General de Presidencia, Ministerio de Educación y Planificación Federal" en una suma aproximada de 150 millones de pesos. "Ninguno de esos subsidios fue ingresado a la Fundación, ni los manejé yo", aseguró el ex apoderado de la Fundación.