El INTI, referente en tecnología a vapor moderno
Como Instituto de referencia en tecnología a vapor moderna, el INTI fue convocado por la empresa ferroviaria Locomotive Services Limited (LSL) de Gales, Reino Unido, interesada en desarrollar en su país un tratamiento de agua para calderas similar al desarrollado en el organismo argentino durante las décadas del ‘60 y ’70 por el ingeniero Livio Dante Porta (ver “El legado de Porta”). El ingeniero Shaun Mc Mahon, especialista del Centro INTI-Mecánica, viajó recientemente a ese país para dar continuidad a las tareas de desarrollo que se vienen realizando desde hace más de dos años.
La tecnología de vapor moderna es la aplicación de métodos, teorías y diseños actuales, a las máquinas tradicionales de vapor de los siglos XIX y XX, pero también a las del siglo XXI. En la actualidad, este tipo de maquinaria a vapor se diseña a partir del estudio termodinámico de los fenómenos que en ella ocurren. Tomando ese punto de partida, e incorporando los avances tecnológicos de los últimos sesenta años, hoy se puede comprobar el mayor nivel de eficiencia de los equipos a vapor.
En la actualidad no puede contemplarse la aplicación de la tecnología moderna de vapor sin el uso de las últimas técnicas para el tratamiento de las aguas de alimentación. Este método consiste en el agregado de aditivos al agua, incrementando su alcalinidad para evitar la corrosión y escamado de la caldera, asegurando así la calidad del agua contenida y del vapor liberado por ella. De este modo, se alarga al triple la vida útil de la máquina (de unos 30 a unos 100 años), se eliminan los problemas operacionales, se reduce la necesidad de hacer exámenes frecuentes y se disminuyen drásticamente las reparaciones mayores. El sólo uso de este tratamiento del agua se convierte en autosostenible dentro del recipiente a presión, dado que mejora su funcionamiento. Por otra parte, se garantiza la seguridad para las personas dado que se reduce la posibilidad de accidentes.
A tal punto se optimizan las máquinas a vapor con este tratamiento de aguas, que los códigos de mantenimiento y de la construcción de calderas nacionales e internacionales están siendo modificados, y Argentina está presentando casos a la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos (ASME), aportando a la actualización de esas normativas a partir de los nuevos criterios probados y ensayados. Y aún hay más. Utilizar el tratamiento de aguas basado en el método de Porta posee una característica que lo hace superior a los otros: se puede aplicar utilizando cualquier tipo de agua y se basa en reactivos químicos de bajo costo, corrientes y amigables con el ambiente.
Del INTI a Gales
La firma LSL venía trabajando desde hace dos años en el desarrollo de un tratamiento de agua que cumpliera con las exigencias y los parámetros del de Porta, con el fin de implementarlo a su flota de trece locomotoras a vapor. Luego de varios estudios, y tras no lograr identificar uno de los componentes de la fórmula argentina, se pusieron en contacto con el INTI dando inicio a la asistencia técnica actual, que involucra a especialistas de los Centros de Química, Energía y Mecánica.
El primer paso de la asistencia a Gales consistió en estudiar las muestras (polvos e incrustaciones) otorgadas por la empresa ferroviaria para determinar sus compuestos. La intervención de INTI-Química fue de gran importancia para identificar la sustancia que aún no había podido ser reconocida por los laboratorios del Reino Unido: un componente denominado con las siglas EBS y que tiene la particularidad de controlar la generación de burbujas o espuma. Clarificada la composición química y el formato físico exacto, se realizaron comparaciones entre los EBS de nuestro país y los disponibles en Reino Unido, concluyendo que los argentinos son los más eficaces para el funcionamiento físico de la maquinaria a vapor.
En paralelo, los Centros de Energía y Mecánica comenzaron a realizar pruebas sobre el comportamiento de los distintos compuestos químicos. Finalmente, a fines de 2012, el ingeniero Shaun Mc Mahon, especialista del INTI en vapor moderno y en operación e ingeniería ferroviaria, viajó a Gales a probar los distintos productos controladores de la capa de espuma (tipo EBS) en la caldera del tren denominado Welshpool & Llanfair Light Railway (W&LLR), proporcionado por la empresa. Las mejoras en el tratamiento no sólo le ahorrarán costos de operación y mantenimiento a la firma, sino que además beneficiarán el cuidado del ambiente, dado que el vapor libera compuestos mejorados y menos perjudiciales. Y esto fue corroborado en las primeras pruebas que se realizaron in situ sobre el vapor liberado por las calderas.