Basura: contenedores inteligentes, de San Genaro al país
Son desarrollados por una empresa santafesina. Informan el grado de llenado del recipiente y permiten optimizar recursos en la recolección.
San Genaro es una pequeña localidad del centro sur provincial, que se convirtió en la ciudad número cincuenta de Santa Fe en 2006. Allí vive y trabaja Luciano Cecchini, un joven emprendedor de 32 años que nació en Capilla del Monte, pero que hace muchos años se trasladó a Santa Fe, y que estuvo nominado por el Instituto de Tecnología de Massachusetts como uno de los 10 innovadores argentinos del año 2015.
Hace años Cecchini dedica su tiempo a la innovación y a la generación de soluciones tecnológicas. Fundó una empresa llamada Boxtronic y lanzó varios productos, entre ellos contenedores de basura con sensores inalámbricos que permiten crear un plan de recolección inteligente, ahorrando recursos y a la vez cuidando el medio ambiente.
En diálogo con el matutino local, el sangenarino por elección contó que la idea nació de una necesidad general, ya que la recolección y generación de residuos es un “gran problema, no solamente en Argentina, sino en todo el mundo”.
Uno de los inconvenientes principales que detectó el emprendedor es el gran gasto que hay alrededor de la recolección, además de los inconvenientes que generan los contenedores rebalsados de basura, y las emisiones de gases y el daño que producen en el planeta.
“Hay contenedores que son para papel, otros para plástico, y toda esa es materia prima que queda tirada durante un montón de tiempo y no se utiliza. Entonces uno de los objetivos era detectar este problema relacionado con la recolección, tanto para gobiernos como para empresas”, comentó.
La intención detrás del desarrollo es ver de qué manera se puede optimizar la recolección de residuos, porque muchas veces un camión tiene que hacer recorrido muy largo para llegar hasta un contenedor de basura vacío o semilleno. “El chofer hasta que no llega al lugar no sabe si el contenedor está vacío o está lleno, pero lo tiene que levantar igual, aunque tenga adentro una sola botella. Así surgió un poco la idea”, relató.
Además de fondo está el problema de la generación de residuos, ya que está calculado que una persona genera más de un kilo de basura por día, y es un número que se incrementa año a año. “Cada vez va a haber más basura, se van a necesitar más contenedores”, enfatizó.
El producto se llama Smart Waste e incluye un sensor con tecnología propia, una aplicación móvil que va dentro de los vehículos que hacen la recolección, y un panel de control (dashboard), con el que la empresa o gobierno podrán monitorear el sistema de contenedores. Los sensores van instalados en los recipientes de basura que pueden ya estar en las ciudades o directamente se pueden adquirir los contenedores que ya vienen con el sensor instalado.
“Están todos conectados y el sistema va informando cuáles están vacíos, cuáles llenos o también los que están siendo trasladados de un lugar a otro”, señaló.
Independientemente de los contenedores inteligentes, como utiliza un software de recolección propio, otro de los productos que se ofrece es también la posibilidad de adquirir la solución informática para ser usada como sistema de recolección para organizar la flota de camiones y la hoja de ruta.
“Son tres soluciones, el software solo, y el sofware incluido con los contenedores con sensor, o los sensores y el software”, destacó.
Diferencias con otros desarrollos
En distintas ciudades del mundo ya se pusieron en práctica experiencias similares con cestos de basura, y contenedores inteligentes, consultado sobre las diferencias con estos desarrollos, Cecchini destacó que la principal es que el sensor que se produce localmente va instalado en cualquier tipo de contenedor, mientras que “los contenedores que hay distintas partes del mundo que tienen un sensor, solamente registran el nivel de llenado, y son contenedores especialmente preparados para esa función”.
“Son muy lindos estéticamente, pero tienen un acabado y un costo muy alto. Un sensor como el nuestro tiene un costo mensual muy bajo, y con los otros estamos hablando de contenedores completos con un sistema muy caro, y que requiere un mantenimiento extra”, resaltó.
Únicos en Latinoamérica
El joven innovador sostuvo que en el proceso de investigación previo al desarrollo, notaron que no existen experiencias de este tipo de productos en Latinoamérica, y tampoco a nivel país. “En Argentina, ni en Latinoamérica existe este producto, y es una gran oportunidad en ese sentido”, subrayó.
Informó además que en nuestro país existen alrededor de 500.000 contenedores de basura dispersos en las distintas ciudades, y hay cálculos que indican que se van a adquirir 150.000 más en los próximos seis meses.
Qué informa el sensor
El sensor indica los niveles de llenado del contenedor, la geolocalización, es decir la ubicación en la cuadra o en la manzana en donde se encuentre, y a su vez, tiene conectividad a internet de manera continua lo cual permite un seguimiento constante.
“Es lo que se llama internet de las cosas, ya que todos los contenedores son inteligentes. Primero están conectados todo el tiempo a internet, y son inteligentes porque el sensor se activa solo cuando tiene basura. Así va avisando al sistema para que se pueda armar un plan de recolección en base a la ubicación de la flota”, indicó.
Además, a través del panel de control del cliente, se puede monitorear no solo el nivel de llenado, sino también acceder a un historial, lo que permite hacer un seguimiento en el tiempo de cómo es el uso en determinadas zonas, y barrios de las ciudades. “Esto permite ejecutar un plan de acción para optimizar los lugares, o trasladar los contenedores hacia otra zona”, puntualizó.
La vida dedicada a la innovación
Luciano Cecchini es diseñador gráfico, pero hace ya 10 años que no trabaja en el rubro. Se define como un emprendedor con varios productos y empresas fundadas en sus tan solo 32 años de vida. Todas ellas dedicadas a soluciones tecnológicas, entre las que se encuentra el sistema de alertas adquirido por el municipio santotomesino, GeoGuardian.
Este año gracias a la presentación del proyecto Boxtronic Smart Waste fue nominado por el Instituto de Tecnología de Massachuset como uno de los innovadores de 2015.
“La nominación tiene que ver con el «know how», con el expertise que uno tiene, y es por gente que te recomienda. Fue una alegría muy grande el reconocimiento”, señaló el emprendedor.
Contó además que otra de las cosas importantes de este tipo de premios es que “hay gente muy grosa que mira lo que uno está haciendo. Esto significa que estás haciendo las cosas bien y de alguna manera esto abrió muchas puertas porque llamaron muchos inversores para formar parte del producto”, destacó.
Audio: Luciano Cecchini
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